El FC Barcelona llega al verano de 2020 exigido, y tendrá que estar acertado en un mercado de fichajes muy caliente. Pese a la limitación adicional que supone la crisis del coronavirus, Josep Maria Bartomeu quiere dejar la presidencia por la puerta grande, y es consciente de que sus próximos movimientos marcarán las posibilidades de un proyecto deportivo llamado a luchar con el Real Madrid tanto a corto como a largo plazo.

La voluntad de los culés es reformar un equipo que se ha ido debilitando, y para ello han fijado objetivos muy ambiciosos. Está por ver si lograrán conquistarlos a base de trueques y ajustando al máximo su presupuesto, pero hay pocas dudas de que con el liderazgo de Leo Messi, la incorporación de Neymar y Lautaro Martínez y la aportación de un central y un centrocampista, este grupo todavía podría dar mucho.

Precisamente, el argentino es una de las apuestas clave de la ventana estival, y aunque queda trabajo por hacer, ya se han realizado avances decisivos. Pese a que los clubes son los que finalmente acaban imponiendo las condiciones, los jugadores cada vez influyen más en sus carreras, porque marcan el camino con sus decisiones sobre traspasos. Y ganarse a un futbolista aumenta notablemente las posibilidades de éxito.

Como indica el diario 'Sport', los azulgrana todavía deben vencer la resistencia del Inter de Milán, pero el 'sí' del ariete a su propuesta es una garantía importantísima. En la Ciudad Condal saben que no pueden confiarse, pero si existen optimismo y tranquilidad es porque convencieron al de Bahía Blanca, que les ha elegido y podría presionar ligeramente a su favor y desactivar las millonarias ofertas de otros pretendientes.

La confianza del punta se consiguió apretando en lo económico y en lo futbolístico y con la ayuda de varias leyendas. El Manchester City o el Real Madrid podrían pagar más que el Barça, pero el ex de Racing es consciente de que mejorará el salario que le ofrecen los 'nerazzurri' y probablemente sus opciones de levantar trofeos. Y todo ello, con la posibilidad de compartir vestuario con dos de sus referentes, un Messi al que admira y con quien ya ha demostrado su buena sintonía en la selección y un Luis Suárez que es un espejo en el que mirarse.

El Barça espera rematar la faena con Lautaro

Y con estos factores jugando a su favor, el Barça espera cerrar el fichaje de Lautaro mirando de reojo a Suárez. El uruguayo fue caro y llegó envuelto en polémica, pero la apuesta valió la pena porque ha hecho historia. Nada asegura que su heredero vaya a seguir el mismo camino, pero sus cualidades técnicas y mentales son muy similares y eso puede ser determinante. Los problemas del nueve se resolvieron con un futbolista que aúna calidad y una voracidad difícil de igualar, y repetir la fórmula podría seguir dando resultado. El convencimiento está, ahora falta hacerlo oficial.