Tal y como han informado en las últimas horas diversas fuentes de Turquía, al menos 13 personas han muerto tras las explosiones de dos vehículos bomba en las inmediaciones del Vodafone Arena de Estambul, el nuevo estadio del Besiktas, apenas dos horas después de la finalización del partido de la Superliga turca que enfrentaba al Besiktas contra el Bursaspor (2-1).

Las explosiones buscaban atacar al parecer un furgón de la policía que se encontraba en los alrededores del estadio, y el diario "Bild" ya ha confirmado que al menos 13 personas han fallecido, estando otras veinte heridas de gravedad. "La bomba estalló en el lugar donde se encontraban nuestras fuerzas de Policía", ha informado el ministro de interior Soylu, confirmando la voluntad de atacar a las fuerzas del orden de Turquía, que aún se encontraban en las inmediaciones del Vodafone Arena dos horas después de la finalización del partido.

Por otro lado, el ministro de Transporte, Ahmet Arslan, ha confirmado en Twitter que se trata de un atentado terrorista, habiéndose desplazado numerosas ambulancias y bomberos a la zona del atentado. Diversos ciudadanos han podido grabar los momentos de minutos después del atentado, con imágenes en las que impera el humo y el caos a apenas 500 metros de una gran zona hotelera de Estambul.

Tras los atentados, circula el rumor en las redes sociales de disparos de armas automáticas que podrían ser de la misma policía contra supuestos terroristas, aunque estas informaciones todavía no están confirmadas.

Recordemos que en el Besiktas turco militan dos ex jugadores del FC Barcelona, Adriano Correia y Ricardo Quaresma, que ya han confirmado que se encuentran en perfectas condiciones. La tragedia del atentado llega apenas una semana después de la desgracia del avión del Chapecoense, que se estrelló en tierras colombianas.