El Manchester City era dueño y señor del encuentro ante el Manchester United durante los primeros 45 minutos. Un dominio que se materializó en dos grandes goles de Kevin de Bruyne y Ihenacho pero que debido al error garrafal de Claudio Bravo a punto estuvo de costarle dos puntos a los suyos. El internacional chileno falló y regaló el gol en bandeja a Zlatan Ibrahimovic, que no perdonó.

Fue en el minuto 42, cuando tras una falta lateral sacada pro Wayne Rooney, el ex cancerbero del FC Barcelona se adelantaba por alto para hacerse con el esférico. Sin embargo, Bravo no se entendió con John Stones, lo que hizo  que el balón quedase muerto dentro del área. Allí aparecieron las "zarpas" de un Zlatan Ibrahimovic que no perdonaba. 

Un gol que dio alas a los de Mourinho después de haber sido abatidos durante todo el primer tiempo, sin casi derecho a réplica. Poco necesitaron los del entrenador portugués para meterse en un partido que finalmente acabarian perdiendo por dos a uno.

Claudio Bravo, que llegó al equipo "citizen" a cambio de dieciocho millones de euros más dos en variables pagados al Barça, disputaba su primer encuentro con el conjunto inglés. De hecho, Guardiola no decidió hasta el final quien sería el titular, si el chileno o Willy Caballero, acabando por decantarse por el de Santiago. Habrá que ver ahora que sucede en los próximos encuentros de los suyos, pues Bravo se mostró muy inseguro en todo momento.