El ariete valenciano que no hace demasiado tiempo intentaba ganarse un sitio en el FC Barcelona, Paco Alcácer, está triunfando de forma descomunal en esta primera parte de la temporada 2018-19 con el Borussia Dortmund, que ya ha anunciado que hará efectiva su opción de compra fruto del excelso rendimiento goleador que está aportando.
Paco Alcácer empezó la jornada de este fin de semana siendo el máximo goleador de la Bundesliga, pero la mala fortuna se ha cebado ahora con él, dado que este pasado viernes tuvo que ser sustituido en el minuto 34 de juego para dejar paso a Mario Götze, por culpa de una lesión que le impidió continuar sobre el terreno de juego frente al Borussia Mönchengladbach.
Era un partido importante contra el segundo de la tabla, y de ahí que a Paco Alcácer le fastidiase haber recaído de sus molestias musculares, que podrían hacer que se pierda alguno de los próximos partidos del Borussia Dortmund en la Bundesliga, aunque sin duda le vendrán bien las vacaciones de Navidad para recuperarse.
Lo que no deberá perder el valenciano es el olfato de gol, teniendo en cuenta la excelente temporada que está completando un Dortmund que, bajo el mando de Lucien Favre, sigue liderando el campeonato alemán y ya se encuentra en octavos de final de la Champions League, que disputará ante el Tottenham. Para superar todos sus retos, necesitará la aportación de Alcácer.
El valenciano al fin ha encontrado su sitio en Europa, jugando en uno de los mejores equipos del continente y que además sabe explotar sus principales virtudes, como son la habilidad y velocidad al contragolpe, así como el oportunismo al estar siempre en el sitio correcto para marcar. Sus desmarques constantes, además, son bien vistos por sus compañeros y en particular por Sancho y Reus.
Paco Alcácer, fortalecido mentalmente
En el FC Barcelona, Alcácer desentonaba con el juego grupal del equipo y no era capaz de explotar lo que mejor sabe hacer. Ahora, el objetivo es que su lesión con el Borussia Dortmund no le afecte lo más mínimo en el sentido anímico, dado que los goleadores, como bien suele decirse, viven de rachas y entrar en un bucle negativo podría ser perjudicial para las aspiraciones de su equipo. Alcácer, en cualquier caso, está demostrando mucha fortaleza mental desde que abandonó el Barça.