Podía haber sido un fin de semana en el que se decidieran las ligas en Italia y en Francia, pero finalmente tanto Juventus como Paris Saint-Germain tendrán que esperar otra semana más para ser campeones. En el caso del PSG, además, cayó con estrépito ante el Lille por 5-1. Una paliza tremenda del segundo clasificado de la Ligue 1 para retratar a los parisinos.

Nicolas Pépé, delantero que ha sonado para el FC Barcelona o para el Bayern de Múnich, fue una de las estrellas del partido al marcar un gol y repartir dos asistencias. El francés, además, también fue el hombre que provocó la expulsión de Juan Bernat en el minuto 37 de la primera parte. El punta se fue en velocidad y el ex valencianista tuvo que agarrarle para que no se quedara solo contra el portero. El VAR decidió que eso era roja y esa acción terminó marcando el resto el encuentro.

El PSG solo tenía que empatar para ser campeón de la Ligue 1 y salió al terreno de juego tranquilo y con la sensación de que el tanto terminaría llegando. Pero fue el Lille quien se adelantó a los siete minutos con un autogol de Meunier. Pero Bernat empataría solo cuatro minutos más tarde al finalizar un jugadón tremendo de Kylian Mbappé, que volvió a ser el mejor de su equipo y que completó una gran primera parte.

La expulsión lo cambió todo y en la segunda mitad fue un festival del conjunto local. Pépé marcó el 2-1 en el 51 tras un buen contraataque. Mabba anotó el tercero solo 14 minutos más tarde tras un buen pase de Ikoné. En el minuto 71, Gabriel le dio la puntilla a los parisinos con el cuarto, y en el 84 José Fonte marcó de cabeza la 'manita' que hizo que el estadio del Lille enloqueciera del todo.

Mbappé rajó tras el choque

Si hay un futbolista al que no se le pudo reprochar absolutamente nada en el PSG fue a Kylian Mbappé. El joven 'crack' fue una pesadilla para la defensa local y en la primera parte pudo desequilibrar el choque en más de una ocasión. Su velocidad y su regate son de otro mundo y solo le faltó que alguien más le acompañara.

Tras el partido, el punta criticó el juego de los suyos por perder y además acabar siendo humillados. "Nosotros debimos jugar con un poco más de personalidad. Es uno de nuestros errores, hay que corregirlo. Jugamos como debutantes. Tenemos que recuperar la concentración. Tenemos un partido el miércoles", apuntó el galo para referirse al choque en el que se espera que los de Tuchel sí puedan cantar el alirón.