El calendario no dará tregua la próxima semana al Napoli, que sigue ahogándose en una crisis de la que lleva tiempo sin poder escapar. Los 'azzurri' están llejos de dar con la tecla y sólo han ganado tres de los últimos 16 partidos (siete empates y seis derrotas), y este sábado dejaron que la Fiorentina se marchara celebrando tras un triunfo a domicilio que les hunde aún más. Su última victoria en casa data del 19 de octubre.

Por un momento pareció que podían adelantarse los locales, pero tras una ocasión desactivada, el duelo se convirtió en un correcalles. Bartlomiej Dragowski voló para salvar el remate de Arkadiusz Milik y frustar a la afición de San Paolo, que veía con desesperación como los suyos lo intentaban con un dominio ficticio, ya que no acaban de encontrar la portería y sus rivales hacían daño cada vez que se atrevían a ir hacia arriba.

En uno de estos arreones, los visitantes estrenaron el marcador, en una jugada que demuestra, una jornada más, que la defensa de los 'azzurri' ya no es lo que era. Marco Benassi bajó de primeras un cambio de juego y encontró a Federico Chiesa totalmente solo en el corazón del área. El extremo genovés apenas tuvo que controlar y tirar de recurso, ya que con un punterazo batió a un David Ospina que estaba vendido.

La reacción de los partenopeos no se hizo esperar, pero el peligro fue escaso y los 'viola' también tuvieron oportunidades. En un bando se lamentaron los intentos sin recompensa de Piotr Zielinski y José Callejón, y en el otro que el guardameta colombiano detuviera en dos ocasiones al propio Chiesa, y que cuando Patrick Cutrone atinó con las redes, los colegiados anularan su diana por un doloroso fuera de juego.

Ni siquiera el paso por vestuarios desbloqueó a los pupilos de Gennaro Gattuso, que en la reanudación volvieron a chocar contra la ordenada muralla toscana. Incluso la fortuna ha abandonado a los napolitanos, ya que la acción de Lorenzo Insigne que pudo convertirse en la igualada acabó estrellándose en la madera. Ese iba a ser el penúltimo golpe de la jornada, porque poco después llegaría la sentencia.

Los seguidores empezaron a pitar desesperados cuando Dusan Vlahovic puso el 0-2, en otra combinación que habla bastante mal de la concentración del equipo. Otro cambio de banda, un pase filtrado por Pol Lirola y el serbio no se puso nervioso. Encaró a su marcador y lanzó un zurdazo con efecto que no pudo detener el cancerbero, y que tumbó a un adversario que pese a sus ganas, ya no pudo levantarse de la lona.

El peligro visita al Napoli en San Paolo

La derrota ante un rival de 'su liga' llega en el peor momento para el Napoli, junto antes de dos compromisos de máximo nivel. En apenas cinco días, le tocará recibir en San Paolo a una enrachada Lazio en la Coppa Italia y a la todopoderosa Juventus en la Serie A. La Champions League, que regresa en febrero, es la última de sus preocupaciones, aunque cada vez parece más difícil que pueda inquietar al FC Barcelona.