A Pep Guardiola se le reconocen varios recursos tácticos, como el cambio de posición de Leo Messi a falso '9'. Con ese movimiento y la colección de títulos posteriores trascendió como entrenador de gran manera. En las últimas temporadas en el City, Guardiola prescindió también de una referencia clásica en la delantera, que ahora recupera con la figura de Erling Haaland. 

La llegada del noruego es todo un desafío en sí mismo para el técnico catalán que a pesar del buen estreno del delantero en el amistoso contra el Bayern, el City perdió el primer título de la temporada frente al Liverpool con una puesta en escena de Haaland nada alentadora. Haaland estuvo muy fijo arriba entre Matip y Van Dijk, notoriamente desconectado del juego del City. 

La referencia de Haaland aleja a la línea defensiva y debería permitir tener mayor libertad a los centrocampistas del City. Sin embargo, contra el Liverpool hubo muchas situaciones en las que nadie se mostraba a los lados de Fabinho, a diferencia de cuando el equipo celeste actuaba con Gabriel Jesús o Foden en esa posición la pasada temporada. De Bruyne se vio muy solo en sus apariciones a la espalda de los centrocampistas del equipo de Jurgen Klopp en varias ocasiones.

Detalles positivos

Cuando el noruego lanzó apoyos en los ataques posicionales y arrastró a los centrales 'reds', se produjeron acciones interesantes con la entrada desde atrás de otros jugadores. Haaland logró dar cierta continuidad, algo que mostró que no todo fue malo por parte del atacante zurdo.

El noruego demostró ser una amenaza continua al espacio. Cada presión desajustada del Liverpool derivó en situaciones ventajosas para los de Guardiola, que no resolvieron bien por una mala toma de decisiones. El partido mostró que cuando De Bruyne sea capaz de recibir entre líneas y girar, la ruptura de Haaland resultará imparable para los defensas contrarios.