Zlatan Ibrahimovic es uno de esos jugadores que, cada vez que habla, no deja indiferente a nadie. El delantero sueco destaca sobre todo por elogiarse a si mismo con un tono a veces burlón hacia los demás, pero también por no tener pelos en la lengua y no callarse nada de lo que piensa en ningún momento.

Actualmente tiene 37 años, pero su ambición por seguir deleitando con su fútbol sigue sin decaer. Recientemente, soltó dos 'perlas' que van muy de la mano con su forma de ser. El delantero sueco, en un evento de LA Galaxy, prometió a su afición batir todos los registros: "Esta temporada les traeré algo a ustedes. Romperé cada uno de los récords en la temporada de la MLS".

Ibrahimovic, díscolo pero con un gran sentido del humor, respondió con una respuesta muy de su estilo cuando le preguntaron por cómo va a terminar la serie Juego de Tronos. "Conmigo en el trono", contestó, el ariete sueco. Está totalmente convencido de que puede seguir haciendo grandes cosas.

La pasada temporada, Ibrahimovic consiguió buenas cifras -el delantero sueco marcó 22 goles y dio 10 asistencias en los 27 partidos que disputó en liga en 2018- pero no le sirvieron para superar las de el delantero venezolano del Atlanta United, Josef Martínez, que anotó un total de 31 dianas.

Ibrahimovic y su paso por el Barcelona

Después de triunfar en el Ajax, lo hizo también en la Juventus de Turín y, una vez el equipo bianconero descendió por el 'calciopoli', Ibrahimovic se fue traspasado al Inter de Milán. Tras triunfar como neroazzurro, llegó al FC Barcelona, pero su paso por el Camp Nou no fue positivo ni para la entidad catalana ni para el propio jugador, que fue el eterno suplente.

Según las noticias que salieron a la luz en esa época, el sueco no habría congeniado con Leo Messi, algo que le acabó relegando al banquillo. Dos gallos en el mismo corral con una mega estrella y un recién llegado que no quiso aceptar el rol de secundario. Finalmente, el FC Barcelona le malvendió al Milan, donde prosiguió con su carrera y siguió triunfando.