Hace unos meses parecía una venta buena y segura, pero la salida de Rafinha Alcántara rumbo al Inter de Milán se ha complicado porque los italianos quieren cambiar las condiciones de su pacto con el FC Barcelona. Catalanes y milaneses apurarán algunas semanas más antes de hacer movimientos, porque hasta el 30 de junio no se habría marcado la fecha límite para certificar el acuerdo.

Los 'nerazzurri' esgrimen que sus problemas económicos les impiden abonar los 35 millones de euros exigidos, y según las versiones que circulan desde hace semanas, su intención es rebajarlos hasta prácticamente la mitad, con un pago que ronde los 18 o 20 'kilos' como máximo. En el Camp Nou hace falta efectivo para cuadrar sus propios balances, así que la respuesta obvia ha sido un 'no' rotundo.

En este sentido, los ingresos propios y derivados de la Champions pueden ser la solución, ya que la recaudación interista se multiplicará hasta cotas que hace años que no alcanzan. La travesía por el desierto ha sido más larga de lo esperado, pero después de un tiempo en la Europa League o incluso fuera de las competiciones internacionales, el cambio debe notarse.

El Barça sabe que el Inter anda necesitado de millones y de refuerzos, pero también que el empujón del torneo puede marcar diferencias. Además de la bonificación por participar en fase de grupos, están las recompensas por puntos obtenidos, por victorias y las correspondientes a televisión y patrocinios. Eso por no hablar de las puertas que le abrirá a la hora de cerrar nuevos contratos.

El Barça quiere hacer caja con Rafinha

En la Ciudad Condal existe la creencia de que si no fuera por su mala suerte con las lesiones, Rafinha se habría confirmado en el Barça, y es por eso que no se le quiere 'regalar', y mucho menos tal y como está el mercado. Si el físico le respeta como ha hecho desde que llegó a San Siro, el brasileño es un futbolista con talento y experiencia, sin olvidar que apenas tiene 25 años.

Aunque es una opción que no gusta demasiado porque el propio futbolista ha declarado que quiere seguir en el Inter, si no hay acuerdo se podrían estudiar otras ofertas, con el objetivo de recaudar una cantidad que realmente se considere justa por su traspaso. Todavía quedan unas semanas, pero habrá que ver hasta dónde van a llegar las negociaciones.