Hay jugadores que se dejan tentar por el dinero al no tener fijada una idea de pertenencia a un solo club, y otros que juran fidelidad a unos colores y, llegue la oferta que llegue, deciden quedarse en su equipo de origen para ser felices. Este último fue el caso de jugadores como Carles Puyol o Francesco Totti, y ahora también del talentoso jugador alemán Marco Reus.

Hace unos años, en verano de 2015, tuvo la oportunidad de fichar por un FC Barcelona que acababa de ganar el segundo triplete de su historia, y que tenía pensado reforzarse con su fichaje de cara a la siguiente campaña. Josep Maria Bartomeu luchó por su llegada, pero recibió la negativa de un Reus que prefería ser cabeza de ratón antes que cola de león en el Barça.

Otros grandes clubes como Real Madrid, Chelsea o Bayern se han interesado también en los últimos tiempos por los servicios del futbolista alemán, pero éste siempre ha preferido quedarse en un Borussia Dortmund donde es el capitán, la estrella y el gran ídolo de la afición. Ha sufrido una plaga de lesiones en los últimos años, pero esta temporada 2018-19 está siendo la de su 'resurrección'.

Es el segundo máximo goleador de la Bundesliga con 13 dianas, y en el global de la temporada ha anotado 17 goles y repartido 8 asistencias en 27 partidos. A sus 30 años, Marco Reus no sólo ha recuperado su mejor nivel en cuanto a números, sino también en lo que respecta al resto de las facetas del juego y a las sensaciones y detalles técnicos sobre el césped.

El Borussia Dortmund ha notado horrores su ausencia en las últimas citas, especialmente en la ida de octavos de la Champions League contra el Tottenham, al sufrir una dura goleada por 3-0 en Londres. De cara a este fin de semana, se prevé que Lucien Favre ya pueda contar con Marco Reus de cara al choque de Bundesliga contra el Bayer Leverkusen.

Marco Reus reaparece con el Borussia Dortmund

Marco Reus ya está prácticamente recuperado de su enésima lesión, pero lo ha hecho con otra cara distinta a las anteriores. Sabe que esta es su temporada de resurrección futbolística, y no está dispuesto a parar. Desea seguir maravillando con su juego y, ante todo, luchar por títulos como la Bundesliga con el Borussia Dortmund.

Ganar un título de semejante calibre le serviría para confirmar, a todos los efectos, que no se equivocó verano tras verano al rechazar las ofertas de los grandes clubes de Europa. Porque, más allá del dinero o los trofeos, existe un tipo de honor que cada vez escasea más en el fútbol moderno: la fidelidad a unos colores y el sentimiento de pertenencia a un club. Y Marco Reus los tiene, el Barça y Bartomeu dan fe de ello.