Kevin De Bruyne está lesionado desde hace semanas, en una ausencia que se preveía que sería de larga duración, pero para la que el centrocampista belga está trabajando duramente con el objetivo de recortar los plazos. De hecho, De Bruyne ha explicado en las últimas horas que los plazos de recuperación se han acortado, y que espera participar en el 'derbi' del 11 de noviembre frente al Manchester United.

Recordemos que De Bruyne se lesionó el pasado mes de agosto en un entrenamiento, y este jueves reveló que podrá volver a entrenar durante el mes de octubre, y que piensa estará en condiciones de jugar el encuentro ante el eterno rival de la ciudad de Manchester.

"Necesito aún 3, 4, 5 semanas, pero estaré allí. Espero poder volver pronto, ayudar al equipo y jugar bien. Mi idea es regresar tras el próximo parón internacional", ha explicado De Bruyne, en lo que sin lugar a dudas se trata de una gran noticia para Pep Guardiola.

El Manchester City le está echando de menos en los últimos partidos, y prueba de ello es la derrota inesperada que sufrió el conjunto 'citizen' en el estreno de la Champions League 2018-19 contra el Olympique de Lyon, en el Etihad Stadium.

El Manchester City, más temible con De Bruyne

El conjunto entrenado por Guardiola es tercero en la Premier League (a 2 puntos de Chelsea y Liverpool, que lideran la tabla de clasificación) y visitará este sábado al Cardiff, un partido en principio más que asequible para los 'citizens'.

Con De Bruyne serán todavía más fuertes cuando regrese de la lesión, aunque la profunda y talentosa plantilla del Manchester City hace pensar que Guardiola no tendría que tener dependencia, ni mucho menos, del polivalente futbolista belga. Con la constelación de estrellas que puede alinear partido tras partido, tiene más que suficiente para sacar adelante todos los partidos del calendario.