Louis van Gaal es un viejo conocido de la afición del FC Barcelona​ y uno de los entrenadores más prestigiosos de la historia reciente del fútbol holandés. El de Ámsterdam ha dirigido a lo largo de su carrera a varios equipos legendarios como el propio Barça o como el Manchester United. A Old Trafford llegó en 2015 para sustituir a David Moyes, que no cumplió con las expectativas que levantó cuando fue contratado.

El neerlandés cogió a un equipo que debía dar mucho más de sí, pero en dos años que pasó allí tan solo levantó la FA Cup. Además, la relación del neerlandés con el vestuario de los 'red devils' no fue demasiado buena, tal y como demuestran las palabras de Rafael Da Silva. El ex lateral derecho del United y actual jugador del Olympique de Lyon explicó su experiencia con Van Gaal, que fue nefasta desde el primer día.

Los mejores momentos de Van Gaal en rueda de prensa

"No me gusta Van Gaal. Cuando me dijeron que iba a ser el entrenador me llamaron muchos amigos. No me lo podía creer, ya que me dijeron que no le gustaban los brasileños. Me dijeron: 'lo primero que hará es sacarte'", comenzó. Al final, esos pronósticos se cumplieron y el ex culé no quiso contar con él. "En realidad fue lo segundo que me dijo porque el primer día no me habló. En el segundo día me dijo que me podía ir. Ni siquiera había entrenado y ya me dijo eso. No me lo podía creer", afirmó.

No obstante, hay futbolistas que no quieren irse sin pelear y el brasileño hizo oídos sordos a lo que le dijo Van Gaal. El de Río de Janeiro decidió quedarse en Old Trafford un año más, pero apenas jugó con el holandés, contra el que carga con dureza. "Intenté luchar por mi sitio. Estuve un año con él. Fue tan, tan difícil. Es una de las peores personas con las que he trabajado", declaró, sin pelos en la lengua.

Rafael criticó con dureza a Van Gaal y sus métodos

Rafael quiso explicar con una anécdota por qué Van Gaal no encajó en el Manchester y no se ganó el respeto de los jugadores. "Estableció una rutina de mierda. Todos los días, después del desayuno, comida o cena, hablaba durante 15 minutos sobre el entrenamiento, sobre lo que pasó, sobre la vida. ¿Sabes cuando dejas de escuchar lo que dice alguien porque habla mucho? Solo quería demostrar que sabía. ¡Era todos los días! ¡Todo el tiempo!. Tienes que esperar a que todos terminen su comida para irse, lo que está bien, pero se puso a hablar 15 minutos, con el debido respeto, sobre mierda", contó.

Por último, dejó caer que Van Gaal era un ególatra que no se preocupó cómo se sintieron los futbolistas a los que dirigió. Según el del Lyon, el neerlandés solo pensaba en lo que era más adecuado para él. "No le importaba como era la gente, solo quería pensar en sí mismo. 'Soy así, me respetas y haces lo que quiero'. Así habla él. Los jugadores se cansan de esto. No es necesario que hable todo el tiempo", finalizó.