Philippe Coutinho se despide, al menos por ahora, del FC Barcelona. El mediapunta jugará en el Bayern de Múnich cedido la próxima temporada después de un año y medio lleno de altibajos en el Camp Nou. El que es el fichaje más caro de la historia del Barça no ha estado a ala altura de las expectativas que había en torno a él y se va por la puerta de atrás.

Costó 120 millones de euros y otros 40 en variables, pero su rendimiento no ha estado acorde al precio que los barcelonistas pagaron por él hace un año y medio. El Barça le fichó para que fuese la mano derecha de Leo Messi y liderase al equipo tras la marcha de Neymar Jr al Paris Saint-Germain, pero las cosas no salieron como se esperaba.

El brasileño no se adaptó ni a su nuevo rol en el Barça ni a la posición en la que le colocó Ernesto Valverde. En temporada y media, ha alternado partidos en los que pasó completamente desapercibido, con otros en los que no estuvo acertado y con unos pocos en los que se atisbó lo bueno que es en realidad. Cuando a Coutinho le han salido las cosas es cuando se ha visto lo gran jugador que es, pero lamentablemente para él y para el Barcelona eso ha pasado en muy pocas ocasiones.

En su etapa como azulgrana, el mediapunta ha marcado un total de 21 goles en 75 encuentros disputados y dio 11 asistencias. Números muy bajos teniendo en cuenta su calidad y su posición en el terreno de juego. Ha jugado casi siempre de extremo en el 4-3-3 y se le pedían muchos más goles y sobre todo mucha más incidencia en el juego del equipo. El ex del Liverpool no ha hecho ni una cosa ni la otra.

El adiós o el hasta luego de Coutinho

El Bayern quiere volver a sacarle brillo a Coutinho y espera poder contar con su mejor versión. Los alemanes se han guardado una opción de compra de unos 120 millones por si el brasileño despuntara y quisieran quedárselo en propiedad. El internacional por Brasil podría haber dicho adiós definitivamente al Barça, pero su marcha también podría ser un simple hasta luego.

El fútbol da muchas vueltas y nadie sabe lo que va a pasar con él. Quizás, el mediapunta recupere su brillo en Alemania y pueda regresar al Barça para triunfar. Quizás, en el Bayern tampoco de el nivel y el Barcelona deba admitir que comprarle fue un error y un pésimo negocio. O quizás, el brasileño sí esté a la altura en Múnich, se revalorice y los bávaros o cualquier otro club paguen los 120 millones que le costó al Barça. Todo puede pasar en un año y la relación entre Cou y el Barça podría estar simplemente en un impasse.