Justo cuando acababa de cumplirse el cuarto de hora de partido en Pucela, Arturo Vidal consiguió deshacer las tablas gracias a un disparo cruzado y fuerte, desde el interior del área, que batió a Jordi Masip. El Barça había hecho unos muy buenos 15 primeros minutos ante el Valladolid, dominando a placer la posesión del balón y llegando con facilidad a los aledaños del área.

En una combinación en la que participaron Messi, Semedo, Riqui Puig y Arturo Vidal, el chileno acabó recibiendo en una posición franca para el disparo y no se lo pensó. Se trata del octavo gol que anota esta temporada 2019-20 en LaLiga Santander, que le sirve para deshacer el empate con Ansu Fati y consagrarse aún más como el cuarto máximo realizador del equipo.

Arturo Vidal se ha destapado esta campaña como un gran llegador desde segunda línea, y sus aportaciones en el plano ofensivo, además de todo el trabajo de construcción y destrucción del juego que ofrece, le han permitido asentarse en los onces del FC Barcelona con asiduidad.

Fue suplente ante el Espanyol por primera vez en muchos partidos, pero este sábado regresó a la titularidad en Valladolid y jugó a un gran nivel durante la primera mitad, anotando el gol que abría la lata y desgastándose en el centro del campo.

Máximo control del Barça en Pucela

El FC Barcelona actuó con Arturo Vidal, Sergi Roberto, Busquets y Riqui Puig en el centro del campo, mientras que Jordi Alba y Semedo también estuvieron casi permanentemente en la sala de máquinas, internándose al ataque cuando pudieron. El control del Barça fue absoluto durante la primera mitad, confirmando así la validez de una nueva buena apuesta de Quique Setién.

Este final de LaLiga Santander 2019-20, se gane o no el título, está sirviendo al técnico cántabro para probar diversos sistemas de juego que podrían serle de mucha utilidad de cara a la vuelta de la UEFA Champions League, con el partido ante el Nápoles programado para el 8 de agosto en el Camp Nou.