Ilaix Moriba es uno de los grandes problemas que tiene que resolver en las próximas semanas el FC Barcelona​ . El centrocampista termina contrato en junio de 2022, por lo que es necesario renovarle esta campaña para que no se vaya gratis dentro de un año. Precisamente por esto, el Barça trabaja en esta ampliación desde hace tiempo, aunque todo se ha complicado debido al dinero que están pidiendo sus representantes.

Desde este verano, la agencia alemana Rogon es la encargada de dirigir el futuro del futbolista. Esto está resultando un problema para el conjunto barcelonista, ya que sus nuevos agentes están reclamando mucho dinero para cerrar el trato y renovar. Por ello, en el Camp Nou decidieron hace unas semanas que lo mejor para hacerle ver al jugador que tiene que desbloquear su renovación es que se vea en dinámica del B. Por eso, hasta ahora se está entrenando con el segundo equipo y su situación no va a cambiar hasta que renueve.

De hecho, el hispano-guineano ni siquiera ha podido jugar el primer amistoso de pretemporada del filial por este veto. Por suerte, según apunta este martes 'Mundo Deportivo', las cosas podrían cambiar muy pronto. En el club cada vez tienen mejores sensaciones con la ampliación del centrocampista y han acercado posturas con sus agentes esta última semana con varias reuniones por vía telemática.

En el Barça se mantienen cautos, pero son optimistas con respecto al futuro de Ilaix. De hecho, se confía en que esta semana pueda ser la decisiva y que el jugador pueda viajar con el primer equipo al 'stage' de Alemania para jugar el sábado contra el Stuttgart. Aunque parece algo precipitado, todas las partes quieren solucionar todo lo más pronto posible y el canterano está deseando volver a vestirse de corto con la blaugrana.

Ilaix podría renovar hasta 2025

El conjunto barcelonista no puede acercarse a las demandas del de Conakri en lo económico, pero está dispuesto a ceder en los años de contrato para que pueda renegociar su sueldo lo más pronto posible. De esta forma, la extensión sería hasta 2025, algo que gustaría en el entorno del futbolista. De esta forma, si Moriba rinde, podrá negociar un aumento en 2023 o en 2024, cuando la situación económica del Barcelona sea mejor.