Su lesión al final de la pasada campaña fue una de las malas noticias del verano, pero hace semanas que Carles Aleñá está listo para competir. La falta de ritmo, eso sí, es un enemigo que le ha cerrado de momento las puertas del primer equipo, pero mientras espera su oportunidad, el de Mataró no quiere quedarse parado.

Hace días que advertía que su situación en el filial no se alargaría demasiado, pero sin una pretemporada y después de varios meses en el dique seco, no está a la altura de sus compañeros. Los minutos en el centro del campo están especialmente caros, y a la espera de que haya algo de calma y más margen para los jóvenes, tendrá que conformarse con lo que hay.

Es evidente que después de su evolución en los últimos meses, la Segunda División B se le queda pequeña, pero al Barça B le viene bien un refuerzo de su calidad y a él seguir recuperando sensaciones. Ha empezado paulatinamente a tener participación con los de Francisco Javier García Pimienta, y en el último de sus compromisos, incluso ha logrado reencontrarse con el gol.

Tras algo menos de media hora contra el Sabadell, ya disfrutó de 70 minutos contra el Peralada, y una vez confirmadas sus buenas sensaciones y alejado un peligroso riesgo de recaída (tiene una lesión muy similar a la de Ousmane Dembélé y el club no quiere sustos), completó los duelos frente a Olot y Atlético Baleares.

Riqui Puig y Carles Aleñá, en sintonía en el Barça B

Ha sido en este último en el que ha podido celebrar un tanto de nuevo, tras un penalti en el primer tiempo que ha permitido al Barça B situar de nuevo las tablas en el marcador. Jiménez había adelantado a los visitantes en el Miniestadi, y aunque los locales han empujado con fuerza, no han logrado llevarse los tres puntos.

No han sido pocos los que han destacado la buena sintonía entre Aleñá y Riqui Puig, que le ha cedido el lanzamiento tras una falta que han cometido sobre él mismo. El de Matadepera sabe que tendrá tiempo para encontrar su sitio, y que su compañero necesita más una alegría para seguir con su complicado camino.