El Real Madrid le debe mucho a Loris Karius, portero del Liverpool en la final de la Champions​ de 2018. Los blancos, concretamente, le deben al alemán buena parte de esa 'Orejona' ante los 'reds', ya que el arquero regaló dos de los tres goles con los que venció el equipo de Zinedine Zidane. El actual meta del Besiktas le puso en bandeja a Karim Benzema el 1-0 y falló en el despeje en el 3-1 con el que Gareth Bale sentenció la Liga de Campeones.

Fueron dos errores de bulto que ningún aficionado al Liverpool olvidará jamás, a pesar de que más tarde se justificaran por el golpe que Sergio Ramos le dio en la primera parte. El central sevillano chocó contra él y le provocó una conmoción cerebral que le pudo afectar el resto del encuentro. Dos años más tarde, el propio Karius se ha pronunciado en el diario 'Sport Bild' sobre esto y sobre lo ocurrido en esa final.

En retrospectiva, debería haber informado lo que estaba sucediendo mucho más rápido. Tuve una conmoción cerebral después de un golpe de Sergio Ramos que limitó mi visión. Esto fue confirmado después de una investigación realizada por especialistas cerebrales", comentó, aclarando que no estaba en plenas condiciones físicas. Esto puede sonar como justificación a sus fallos clamorosos, aunque él mismo ha admitido que nunca ha querido usarlo como tal.

"Al principio estaba feliz porque sabía por qué pasó todo, pero no quería hacerlo público. Cuando eso finalmente sucedió, hubo muchas reacciones de enojo e insultos, a menudo muy bajos. Nunca lo usé como una excusa", explicó. No obstante, no entiende cómo la gente se tomó a broma este golpe y siguió burlándose de él por las cantadas que tuvo en la final, "Pero cuando la gente se ríe de alguien que tiene la cabeza gravemente herida, me cuesta entenderlo", puntualizó.

Lo cierto es que es evidente que una conmoción siempre afecta al resto de sentidos y que pudo tener influencia en su actuación ante el Madrid. Pero a pesar de eso, también hay que reconocer que el germano ya tuvo errores importantes parecidos a esos en partidos previos sin ningún problema médico de por medio. También en el Besiktas, donde está cedido, ha vuelto a tener algunas cantadas inexplicables como las que tuvo en la final.

Karius lamentó los insultos y amenazas

Por último, Karius lamentó los insultos recibidos por culpa de sus regalos en el choque ante el Madrid de 2018. "He tenido algunas amenazas de muerte. Pero no puedo tomarlas en serio. Estas son personas que publican comentarios de forma anónima y ni siquiera muestran sus caras en sus perfiles. Si lees todas las publicaciones, no puedes dormir durante dos días. Es una locura lo que la gente dice desde el anonimato. No creo que si me vieran se atrevieran a abrir la boca", concluyó.