La directiva del Camp Nou ha tenido días dulces y otros amargos, y este lunes fue uno de esos días que dejan un sabor agrio en el paladar. Samuel Umtiti se ha vuelto a lesionar, y esta vez ha sufrido una fractura del quinto metatarsiano de su pie derecho en uno de los entrenamientos del primer equipo y está prevista su intervención quirúrgica para este mismo martes.

Desde que participó en el Mundial de Rusia 2018, tras saltarse todas las advertencias y recomendaciones de los servicios médicos del Barça sobre su rodilla, no ha vuelto a ser aquel zaguero imponente que llegó del Olympique Lyon en la temporada 2016/17. Desde aquella cita mundialista, el francés solamente ha disputado 50 compromisos con la elástica blaugrana en tres temporadas y media.

Sólo ha estado en el terreno de juego durante 3.501 minutos, y se ha perdido 64 partidos entre lesiones, COVID -dos veces- y problemas gástricos. Ahora, después de su última fractura en el pie derecho, la cantidad de tiempo ausente aumentará aún más. Sin embargo, por 'suerte', Xavi Hernández todavía no confiaba plenamente en él, por lo que no es una pieza que el egarense considere importante dentro de su esquema de juego. Además, sólo lo ha utilizado en un encuentro, y fue el pasado 12 de diciembre ante el Osasuna en Pamplona, donde disputó los 90 minutos.

A pesar de ello, es importante destacar que en las dos temporadas antes del Mundial del 2018, el nacido en Yaoundé gozaba de un muy buen ritmo, y jugó 83 partidos entre ambas campañas. Desde entonces, el dorsal '23' no ha podido mantenerse sano ni recuperar aquel estado físico que le hizo firmar por el Barça con uno de los emolumentos más elevados de la plantilla.

En caída libre

En pocos años, 'Big Sam' pasó de ser uno de los defensores centrales mejores pagados y con mayor potencial de crecimiento, a tener un valor de dos millones de euros según 'Transfermarkt'. Sus actuaciones lo han llevado a estar en la rampa de salida de la institución, pero su elevado sueldo obligó a los de Joan Laporta a negociar una renovación para poder reducir la masa salarial del equipo, y así, nuevamente, brindarle otra oportunidad de ganarse un puesto. No obstante, su enésima lesión lo ha vuelto a frustrar todo.