Los últimos mercados de fichajes han destacado el nombre de Philippe Coutinho, y el del verano 2020 no será una excepción. El carioca sigue buscando su sitio en el Allianz Arena, y a final de curso se verá obligado, una vez más, a decidir su futuro. Su regreso al FC Barcelona, si no hay novedades, es una opción complicada, y de tanto en tanto el crack demuestra lo que ya ha dicho de palabra, que quiere quedarse en Alemania.

Este sábado, el Bayern de Múnich visitó el Rhein-Neckar-Arena, y el atacante aprovechó la oportunidad que le brindó su entrenador. Hansi Flick había reconocido en rueda de prensa que sería titular contra el Hoffenfeim y que le dejaría espacio para seguir adaptándose al equipo, ya que con las lesiones de Robert Lewandowski y Kingsley Coman, la parcela ofensiva necesita que todos aporten su granito de arena.

"Es su oportunidad para terminar de integrarse en nuestro juego. Lo está haciendo bien y le tengo muchísimo aprecio, tanto al jugador como a la persona que es. Es importante que vaya sumando partidos y ponga a prueba las cualidades que lleva dentro de sí. Todos esperamos que termine mostrando su mejor nivel. Ahora es el momento de hacerlo", explicó el técnico en su comparecencia ante los medios. Y funcionó.

Después de varias suplencias y algunos encuentros sin brillo, el ex del Liverpool se destapó con un doblete en un 0-6 que demostró que los bávaros no encontraron rival en los hombres de Alfred Schreuder. Serge Gnabry, Joshua Kimmich y Joshua Zirkee consumaron la goleada en apenas un cuarto de hora, y el '10' respondió en el minuto 33 con un buen derechazo tras encontrar un rebote en el área y en el 47 rematando de primeras un pase de Thomas Müller. Antes de que se produjera un espectáculo poco habitual, Leon Goretzka cerró el marcador.

Esto no es una victoria definitiva para Coutinho, pero desde luego sí es un paso adelante si desea seguir formando parte del campeón de la Bundesliga. La directiva le ha dado algún toque de atención por su irregularidad y es difícil que se ejerza una opción de compra que cuesta 120 millones de euros, pero el atacante es un jugador interesante y podría buscarse un pacto con el Barça en otros términos.

Final inesperado en el Hoffenheim-Bayern

El buen rendimiento de Coutinho quedó empañado por un episodio desagradable en el Hoffenheim-Bayern, ya que la afición visitante dedicó pancartas e insultos continuados a Dietmar Hopp, presidente del conjunto local. Pese a la mediación de los jugadores y de la directiva, no hubo reacción, y el partido terminó con ambos equipos pasándose el balón entre ellos y charlando durante los últimos 13 minutos, en los que se certificó una contundente protesta sobre el terreno de juego a lo que estaba sucediendo en las gradas.