¡Un día más que especial para el FC Barcelona! Xavi Hernández, histórico mediocampista del club azulgrana regresó a su hogar para dirigir al primer equipo, y consiguió la victoria en su estreno ante el Espanyol, en el derbi en el Camp Nou. No fue sencillo abrir el marcador, pero Memphis Depay lo logró desde los doce pasos.

A casa llena, cada jugador dejó hasta la piel en el terreno de juego para hacerse con la victoria, y aunque lo lograron por la mínima, las sensaciones al final del partido fueron muy positivas. El equipo respondió, Xavi sumó los primeros tres puntos y escaló tres posiciones en la clasificación de LaLiga; se sitúan en la sexta casilla con 20 puntos.

Uno de las piezas más destacadas del compromiso, pese a que saltó al campo en el minuto 46 para sustituir al debutante Ilias Akhomach, fue Abde Ezzalzouli. El joven delantero se lució gracias a su desparpajo, velocidad y electricidad. Mostrándose siempre como opción y buscando generar jugadas de peligro.

Abde fue gran protagonista en el frente de ataque del cuadro de Xavi Hernández. Pese a que no logró ver puerta, su visión de juego y capacidad de generar brindaron importantes aportes a un Barcelona que no se rindió nunca en el compromiso, pese a tener la ventaja en el marcador.

La alternativa ideal

El rol que desempeñó, más como extremo que como delantero, gustó y mucho. Ante la gran cantidad de bajas por lesión que presenta el primer equipo, uno de los inconvenientes que presentaba Xavi era el no contar con extremos de calidad, capaces de encarar el tú a tú… Abde demostró que puede ser una alternativa de lujo. ¿Problema resuelto? Aún no, pero involucrarlo en el once será clave para el equipo.