Arthur fue uno de los grandes fichajes del FC Barcelona 2018-19, y cuajó una temporada ilusionante aunque con algunos 'peros'. El de Goiania tardó poco en adaptarse al Camp Nou y brilló con calidad y personalidad pese a su juventud, aunque el curso se le hizo demasiado largo y la exigencia física acabó pasándole factura, dejándole 'tocado' y con un bajón que no consiguió remediar.

Ernesto Valverde cuidó al brasileño todo lo que pudo, pero finalmente admitió que los problemas físicos se habían convertido en un obstáculo. Las lesiones musculares le incomodaron en el tramo final de la campaña, en el que Arturo Vidal tomó su relevo en la medular pero aportando un perfil completamente distinto a la sala de máquinas del conjunto barcelonista, impidiendo esa alternancia a la que tanto partido habían sacado los culés.

De cara al segundo año del crack como azulgrana, los técnicos han elaborado un plan especial para el centrocampista, con el objetivo de obtener su mejor versión. La intención es concederle unas semanas libres tras la disputa de la Copa América, para que cuando regrese a sus obligaciones con el primer equipo realice un trabajo de recuperación y preparación que pueda potenciar su rendimiento.

Según apunta 'Mundo Deportivo', el Barça quiere reforzar y potenciar su musculatura, darle velocidad y reducir de paso el riesgo de lesiones, para poder aumentar progresivamente la carga de partidos sin temor a repetir esta misma situación. El citado medio asegura que el joven ya ha puesto de su parte, y que hace unos meses empezó a trabajar con los nutricionistas del club para pulir varios aspectos de su dieta.

Arthur puede ser clave en el Barça del futuro

Teniendo en cuenta que este era su debut en Europa y ni más ni menos que en el Barça, hay que reconocer que Arthur sigue siendo un futbolista muy prometedor. No todos están capacitados para dejar grandes sensaciones dando un salto tan pronunciado, y al ex del Gremio de Porto Alegre se le recuerdan noches memorables en Clásicos o en auténticos exámenes en la Champions.

Si crece física, técnica y tácticamente, el brasileño apunta a gran estrella, y se acercará a un sueño que ya cumplió en parte cuando se mudó a la Ciudad Condal. El de Goiania advirtió que quería mantener su identidad, pero reconoció que parecerse a Xavi Hernández y Andrés Iniesta sería un honor y un indicativo de que todo va sobre ruedas. Y las similitudes son más que evidentes.