El FC Barcelona ganó la cuarta Copa del Rey consecutiva con un partidazo frente al Sevilla, gracias a un once de gala en el que había una diferencia sutil que ni siquiera se notó. En la portería estaba Jasper Cillessen, que es un suplente con calidad de titular y demostró que en el torneo del KO no hay quien le haga sombra.

Suya fue la acción determinante para que los catalanes abrieran la lata, poniéndose el disfraz de pasador y dejando a Philippe Coutinho solo a 50 metros de distancia. El centrocampista brasileño recogió el envío, avanzó, superó al guardameta y le regaló el gol a Luis Suárez para encarrilar el primer título de la temporada.

Ter Stegen felicita a Cillessen

Tras el encuentro, Marc-André Ter Stegen quiso tener un detalle con el holandés, y le incluyó en su fotografía de la celebración con un mensaje de felicitación por su cumpleaños. En un momento que todos suelen compartir con sus familiares, el alemán se detuvo para reconocer a su compañero el mérito que merece, destacándole y demostrando que a pesar de la competencia su relación es buena.

"¡2015, 2016, 2017, 2018! ¡4 veces consecutivas campeones de Copa! ¡Lo hemos vuelto a hacer, y felicidades Jasper Cillessen! #Copa30 #ForçaBarça", resaltaba el de Mönchengladbach, rodeando cariñosamente al de Nimega con su brazo. Ambos han dejado claro que su amistad es real, y esta es otra muestra más de ello.

El Barça encuentra el equilibrio en la portería

"Nos llevamos muy bien. Nos entendemos en alemán y sobre todo en inglés, pero también en español cuando hablamos con 'Dela' (José Ramón de la Fuente, entrenador de porteros) y con los porteros que suben del filial. Nuestra relación es buena y los entrenamientos con él son divertidos. Nos damos consejos y comentamos detalles de los entrenamientos", insistía Cillessen cuando le cuestionaron hace unos meses.

La convivencia entre un guardameta titular y uno suplente nunca es sencilla, y el Barça lo comprobó con la presencia de Claudio Bravo, con el que había respeto mútuo pero saltaban chispas cada vez que había cambio de roles. Tanto el chileno como Ter Stegen querían ser la prioridad, y con la llegada de Cillessen se confirmó una garantía con un clima más calmado. Y los títulos siguen llegando.