Desde que Luis Enrique aterrizó en el banquillo del FC Barcelona en la temporada 2014-15, el técnico asturiano se ha ido adaptando a lo que significa dirigir a un equipo como el Barça, además de aprender de algún que otro "error" o imprudencia táctica en determinados partidos.

El Barça jugará el próximo jueves un partido complicado contra el Athletic de Bilbao en San Mamés, y para afrontarlo se prevé que "Lucho" siga la estrategia que usó la pasada campaña en el primer partido de 2016, contra el RCD Espanyol también en Copa del Rey.

En aquel encuentro, Luis Enrique colocó al "once de gala" sobre el césped, anulando así cualquier sorpresa inesperada gracias a la presencia sobre el terreno de juego de Bravo, Alves, Piqué, Mascherano, Alba, Busquets, Rakitic, Iniesta, Messi, Neymar y Luis Suárez.

Fue una evolución con respecto a lo sucedido un curso antes, cuando Luis Enrique quiso hacer rotaciones contra la Real Sociedad en Anoeta, dejando Luis Enrique en el banquillo a jugadores como Leo Messi y Neymar. Los culés cayeron en aquel duelo de Liga (1-0), mientras que la pasada temporada las cosas fueron ligeramente mejor con el empate cosechado en Cornellá-El Prat (0-0).

El Barça, nuevamente con el once de gala

De cara al duelo del jueves 5 de enero contra el Athletic, la idea es que el FC Barcelona vuelva a apostar con el once de gala, con la inclusión de Ter Stegen en la portería, la diferencia de Sergi Roberto en el lateral derecho y la posibilidad de que Umtiti juegue actúe en el puesto de Mascherano. La "MSN", en cualquier caso, estará en el once titular. "Lucho", como la mayoría de técnicos, aprende de sus errores.