Neymar Júnior nunca estuvo interesado en dejar el FC Barcelona. El mismo crack lo dejó claro el día de su renovación, afirmando que si bien hubo muchos clubes interesados en sus servicios, nunca contempló otra cosa que no sea seguir en Can Barça. Eso lo saben desde el club azulgrana pero en el Paris Saint-Germain no lo tenían asumido... Hasta ahora.

Los franceses siguieron insistiendo en su contratación a pesar de ese nuevo contrato. Optaban por pagar su cláusula y fundirlo de oro. Sin embargo, el jugador le dejó claro a su representante, Wagner Ribeiro, que no había posibilidades de una futura saluda.

Por eso, Ribeiro "vaciló" a los galos en unas negociaciones que desde París, y tal y como informa el periodista Albert Masnou, valoraron como "muy anormales". Estas habrían acabado con la paciencia del equipo francés, sobre todo por lo demandado. 

Las exageradas peticiones de Ribeiro para el fichaje de Neymar

Y es que las exigencias al PSG fueron realmente exageradas. Se pedía un contrato de 40 millones de euros, un avión privado para los partidos de la selección y una cadena de hoteles a su nombre, entre otras cosas como aseguró el mismo Ribeiro. Algo que de sobra sabía que no podían cumplir.