Si tuviéramos que destacar a un jugador en particular que brilló por encima del resto en el Athletic-FC Barcelona, ese fue sin duda Ivan Rakitic. En un día en el que Leo Messi y Luis Suárez no estuvieron demasiado finos de cara a portería, el centrocampista croata fue la "luz salvadora" del conjunto culé para decantar la balanza final del partido hacia el bando culé.

En el minuto 21 de la primera mitad, un gran centro al área de Arda Turan fue rematado en carrera por Rakitic, un especialista en las llegadas al ataque desde segunda línea, que perforó la portería de Iraizoz con un prodigioso y potente cabezazo.

Sin embargo, no sólo fue el gol lo que aportó Rakitic al Barça, sino una gran consistencia en el centro del campo, convirtiéndose en un "todo-terreno" esencial tanto para atacar como para defender. Además de ordenar al equipo, distribuir juego y oxigenar la zona de ataque, el croata presionó la salida de balón del rival, aportando defensivamente cuando el equipo más lo necesitó.

Rakitic fue el centrocampista total del FC Barcelona, un jugador diferente que puede actuar tanto de brújula como y canalizador de juego como de Busquets, cortando jugadas rivales y distorsionando el juego del contrario. Al final, su buen rendimiento sirvió para que el Barça se llevara su segunda victoria en las dos primeras jornadas de Liga 2016-17.