Siempre que lo explica queda claro que los inicios de Luis Suárez no fueron, para nada, fáciles. Este joven uruguayo nació en una familia humilde y su espíritu inconformista le llevó a enamorarse de dos amores imposibles: su actual mujer Sofía y su actual equipo de fútbol, el FC Barcelona. Y toda la historia del nueve blaugrana podría escribirse alrededor de estos dos, con una motivación que le llevó a cruzar varias veces el "charco" para ver a su amada… Y a su amado Barça.

Así lo explica el mismo jugador charrúa en una entrevista reciente para "El Gráfico". En ésta, Suárez relató cómo fue su primera visita a la Ciudad Condal y todos los problemas económicos que le llevaron a ni tan siquiera plantearse el visitar el Camp Nou como un turista más. Todos sus sueños a un paso pero que tardó en dar varios años.

"Fui a visitar a mi novia, paseamos por los lugares turísticos típicos y al Camp Nou lo vi de afuera, no tenía la posibilidad de entrar, tampoco dinero para hacer la visita turística", relató el atacante sudamericano para el medio antes mencionado. Sin embargo, siendo ya jugador del Ajax de Ámsterdam y felizmente casado con Sofía sí que pudo cumplir uno de sus grandes sueños. El otro llegaría varios años después cuando acabaría firmando por el equipo blaugrana.

"Cada vez que coincidía un día de descanso en el Ajax y había partido del Barcelona, aprovechábamos para visitar a la familia de Sofía. Nos gustaba la ciudad, hay muchos restaurantes uruguayos que nos hacían sentir bien. Y de paso conseguía entradas que me proporcionaba Gabri, que había sido compañero mío en el Ajax o mi representante, para ver al equipo. Disfrutaba con ese Barcelona", concluyó el "pistolero".