Hace poco más de cuatro años que Ivan Rakitic decidió cambiar el Sevilla por el FC Barcelona, y su decisión no podría haber sido más acertada. El centrocampista se ha convertido en un fijo en la medular azulgrana y ha llenado su vitrina de trofeos, y cuando más le rondaba una salida, volvió a explotar sobre el terreno de juego. Si en 2017 estuvo de récord, 2018 podría superarlo.

El de Möhlin ha demostrado que es capaz de ganarse la confianza de cualquier técnico, lo que queda claro sabiendo que entre enero y diciembre del año pasado disputó 63 partidos, 57 en la escuadra culé y 6 con la selección de Croacia. Además de Ante Cacic y Luis Enrique, Zlatko Dalic y Ernesto Valverde le han considerado pieza clave en sus esquemas, lo que queda más claro todavía con los datos recientes.

A falta de tres meses para terminar el año, el crack podría batir su propia marca de participación, y es que ya lleva 44 encuentros de los 47 a los que aspiraba, en dos de los cuales cayó por problemas físicos. Son, en este caso, 33 con el club y otros 11 con su combinado nacional, los que ha ido acumulando por los compromisos de clasificación y en su camino hacia la final del Mundial de Rusia.

Como mínimo, a Rakitic le quedan 14 citas en LaLiga, 6 de Champions y 6 con Croacia, lo que dispararía su registro hasta las 70 apariciones. Parece complicado que las vaya a jugar todas -precisamente por la importancia que tiene para Dalic y Valverde-, pero aun así, tiene muchos números para acabar celebrando otro curso completamente impecable. No hay quien le pare.

Rakitic, titularísimo y dosificado en el Barça

De momento, ya ha sido liberado del último amistoso de Croacia, y el Txingurri advirtió que tras el parón volverían las rotaciones al Camp Nou. En el último año, la carga de minutos ha sido brutal, aunque Ivan Rakitic confesó que un cambio en su alimentación le había ayudado a ser el pulmón que es hoy en día. Tras descubrir que es celíaco y realizar algunos ajustes en su dieta, ha jugado más que nadie en el Barça, y ni siquiera Messi, Suárez o Busquets se le pueden comparar.

La intención, como se ha ido viendo, es la misma de siempre, confirmarle como titular y refrrescar sus piernas dándole descansos desde el banquillo, una tarea que en esta campaña podrían asumir Arthur, Arturo Vidal o incluso Sergi Roberto. Los entrenadores tienen los tiempos más que medidos, porque está claro que a una pieza como esta, hay que esforzarse en cuidarla.