La tormenta en Francia, con Leo Messi como protagonista, no se detiene. Habían sido semanas turbulentas por la sanción al argentino después de viajar, sin autorización del club, a Arabia Saudí. El París Saint-Germain había sancionado al jugador y, posteriormente, él pidió disculpa. A pesar de ello, la guerra no ha terminado y en el Parque de los Príncipes han vuelto a dejar claro que no están contentos con el '30'. 

Como ha pasado de manera recurrente en estos últimos meses, en la previa del choque contra el Ajaccio por la trigésima quinta jornada de la Ligue 1, la afición parisina pitó a Messi cuando la megafonía anunció que sería titular. Se trató de su primera titularidad desde que el PSG le levantó la sanción, pero a pesar de que desde el club han intentado limar asperezas, desde las gradas no le han perdonado. 

Descontento en París con Messi 

Merece la pena recordar que los ultras del conjunto parisino no asistieron al PSG-Aajaccio de este sábado, puesto están en huelga desde el pasado miércoles. Eso no ha evitado que se repitieran los silbidos en contra de Messi, en la previa, pero también en varios tramos del enfrentamiento cuando se hacía con el balón. El descontento en Francia es real y todo apunta a que la relación entre ambas partes está completamente rota y sin opción a 'remendarse'. 

Con el pasar de los minutos, las reacciones fueron 'mejorando', porque un sector del público llegó a aplaudirle. Sin embargo, cada vez es más notoria la división de los aficionados del PSG con respecto a un Messi que está más fuera que dentro del conjunto entrenado por Christophe Galtier. Terminaron celebrando la victoria, por 5-0, con una actuación estelar de Kylian Mbappé en la segunda mitad. 

Messi, futuro en el aire

A día de hoy, el futuro del futbolista de 35 años es una incógnita, pero cada vez parece más claro que no extenderá su contrato más allá del 30 de junio. Su primera opción es recalar en el FC Barcelona, pero el movimiento depende de que los blaugrana puedan solventar sus profundos problemas con el 'fair play' financiero y demuestren tener capacidad para inscribirlo en LaLiga. Están a la espera de que sea aprobado el plan de viabilidad económica para poner manos a la obra. 

Cuando desde la patronal den luz verde, comenzará el trabajo más complicado: completar ventas para poder liberar el vestuario y generar plusvalías. Es una misión complicada, pero hay cierto optimismo de que Messi esperará a los blaugrana, a pesar de que tiene una 'jugosa' oferta desde Arabia Saudí, donde están dispuestos a ofrecerle entre 400 y 600 millones de euros para que se sume a las filas del Al-Hilal a partir de la próxima temporada.