Su reciente actuación en la Champions está en la retinas de todos, pero más allá del jugador total que domina el mundo del fútbol, detrás de Leo Messi hay mucho trabajo. El argentino tiene un talento innato para el deporte del balón, pero no sólo con eso ha llegado a la élite. Una persona que le conoce bien ha explicado qué hay detrás del '10'.

Se trata de Carles Rexach, uno de los 'descubridores' del de Rosario, ex jugador, entrenador y empleado del FC Barcelona. El catalán ha repasado para 'Sun Sports' la trayectoria del delantero desde la primera vez que le vio, y ha revelado algunas cualidades que le hacen diferente. Para él ya está entre los mejores de todos los tiempos.

La relación de Messi con el Barça, la clave del éxito

El barcelonés ha empezado destacando que la historia de la mayor estrella de los culés no es tan bonita como la pintan: "A la gente la historia de Leo Messi le parece un cuento de hadas, pero para llegar hasta donde ha llegado realmente ha tenido que sufrir mucho, y ese sufrimiento le ha hecho más fuerte".

"Para mí sería muy fácil decir que con solo verle sabía en qué se convertiría, pero no. Lo que vi en Messi fue a un niño que, si no se lesionaba o si no decidía pasar del fútbol , seguro que se convertiría un crack de primera línea", ha apuntado, asegurando que al volver al club avisó que tenían que fichar a "ese niño con una técnica descomunal, todo instinto y nacido para jugar a fútbol".

Según Rexach, la clave del éxito ha sido la relación de Leo con el Barça, que ha alimentado a ambas partes y ha formado una sociedad histórica: "El fútbol practicado por el Barça ha sido perfecto para él. El hambre se juntó con el deseo de comer. Y como es natural, esta combinación se ha vuelto explosiva con el paso de los años. Si sumas Messi y Barcelona y Barcelona y Messi, ahí tienes el resultado".

Messi no necesita el Mundial

Entre otras cuestiones, 'Charly' ha reflexionado sobre la comparación de Messi con leyendas de la talla de Pelé o Diego Armando Maradona, y considera que al de Rosario no le hace falta más para demostrar que merece un lugar entre los grandes. "A veces creo que se da demasiada importancia al Mundial", ha señalado, aunque ha admitido que "para él ganarlo sería la guinda del pastel".