Después de un viaje de más de trece horas desde Argentina a Barcelona en un avión de Air France, el mejor jugador del mundo ya aterrizó y descansó en tierras catalanas tras abandonar la concentración de Argentina. Leo Messi llegó al aeropuerto de El Prat pasadas las dos de la tarde y no se le vio del todo dolorido en su caminar por las dependencias aeroportuarias. 

De allí, el diez del Barça se dirigió directamente a su domicilio donde descansó junto al resto de su familia. Pues tanto jugador como club azulgrana, que habían conversado antes del viaje, habían concretado que el futbolista pasaría las pruebas médicas el lunes, con el jugador ya descansado y en frío tras el duro viaje.

Después, el crack rosarino será sometido a una resonancia magnética en las instalaciones del club culé. Con esa prueba los médicos blaugranas sabrán el estado real del abductor y el pubis del futbolista, que le han impedido disputar el siguiente encuentro de la selección argentina ante Venezuela de este martes.

Con ello, será el club el que decida junto a Luis Enrique y el propio crack si puede jugar ante el Alavés o bien ha de descansar.

El comunicado oficial de los médicos argentinos es el siguiente:

"El capitán de la selección padece un cuadro de dolor inguinocrural, por lo que no participará en el próximo compromiso de Eliminatorias. Esta mañana, Lionel Messi realizó tratamiento médico y kinésico por el cuadro de dolor inguinocrural. Seguirá con indicación de reposo deportivo y no jugará frente a Venezuela, por la fecha 8 de las Eliminatorias de clasificación a Rusia 2018".