El mejor Messi brilla con Argentina y la eleva a otro nivel

Argentina continúa con paso firme ante cualquier rival que se le cruce por enfrente. Desde julio de 2019 que la 'albiceleste' no pierde un compromiso por ninguna competición ni tampoco amistoso, lo que contrasta el buen momento que atraviesa el seleccionador Lionel Scaloni con su plantilla. Sin embargo, en ella siempre resalta el '10', el jugador inamovible dentro de su esquema de juego.

En el último amistoso ante Jamaica el combinado sudamericano arrancó con Lionel Messi en el banquillo debido a que tenía un cuadro gripal leve que le había afectado después del partido ante Honduras. A pesar de ello, el 'astro' del PSG entró en la segunda mitad, a 35' minutos del final cuando el encuentro estaba (1-0) a favor de los 'locales' en el Red Bull Arena de Nueva Jersey.

La diferencia se notó inmediatamente, con un Messi participativo y líder, manejando el balón a su antojo y abriendo los espacios oportunos para que sus compañeros tuviera la oportunidad de ampliar el marcador. No obstante, sería él quién se encargaría de bajar el telón del partido en dos oportunidades antes de que el colegiado pitara el final del encuentro.

A los 87' hizo un remate cruzado desde fuera del área que terminó batiendo al guardameta Andre Blake, que ya había frenado el grito de gol del atacante en dos ocasiones. Y acto seguido, tan solo dos minutos después, 'La Pulga' cobraría una falta que él mismo ocasionó y que colocó en un ángulo esquinado a ras de suelo inatajable para el portero.

Día de récords 

Con esta victoria sobre la mesa, el rosarino logró alcanzar los 100 triunfos con la camiseta de Argentina, algo que ningún otro futbolista había logrado. Además, llegó a los 90 goles con su selección, lo que le permite subir al podio de máximos goleadores internacionales por detrás del iraní Ali Daei (109) y del portugués Cristiano Ronaldo (117).

Así las cosas, el último escalón antes del Mundial será frente a los Emiratos Árabes Unidos el próximo 16 de noviembre, tan solo cuatro días antes de que la competición abra sus puertas con el Catar-Ecuador. En principio, será un encuentro donde Scaloni no arriesgará a sus mejores armas y servirá de última preparación de cara al sueño máximo: alzar la Copa del Mundo.