Leo Messi no se cansa de batir récords y pulverizar registros. Si con su 'doblete' al Espanyol se colocó a tan sólo 50 goles de Pelé como máximo goleador de la historia en un único club, este martes ha logrado una nueva gesta que le permite volver a acaparar portadas en la prensa internacional. Y es que, con el golazo de falta directa anotado contra el Sevilla, Leo Messi se pone con 415 dianas en LaLiga.

El mito viviente del FC Barcelona supera así los 414 goles que ha marcado Cristiano Ronaldo entre la Premier League (84 con el Manchester United), LaLiga (311 con el Real Madrid) y la Serie A (19 con la Juventus), convirtiéndose de esta forma en el máximo goleador de las cinco grandes ligas de Europa (España, Inglaterra, Italia, Francia y Alemania).

'La Pulga' agranda todavía más su leyenda, y ya suma nada menos que 594 goles con el FC Barcelona, teniendo muy cerca los 600 con la camiseta azulgrana en todas las competiciones. Por si fuera poco, el rosarino lleva siete goles oficiales de falta esta temporada, igualando su mejor registro, y encadena tres jornadas consecutivas anotando de libre directo.

Marcó a Betis, Espanyol y Villarreal a balón parado, y quiere seguir ampliando su buena racha en este aspecto el próximo sábado contra el Atlético de Madrid, que seguro que intentará no cometer faltas en la frontal del área de Jan Oblak. Por otra parte, son ya 32 los goles de Leo Messi en esta Liga, que le sirven para coger ventaja con respecto a Kylian Mbappé en la lucha por la Bota de Oro 2019 (27 dianas lleva el francés).

A cada partido que pasa, en definitiva, Leo Messi sigue demostrando que es el mejor futbolista del planeta y también de la historia, algo que quedará todavía más patente cuando decida colgar las botas. Leo Messi es un artista único en el mundo, y lo que hace con el balón está fuera del alcance del resto de jugadores que dedican cuerpo y alma a este deporte.

Luis Suárez, un buen escudero para Messi

Sólo por su talento innato, no queda más remedio que rendirse a sus pies y dejar que siga deleitándonos con sus grandes actuaciones. Este martes, contra el Villarreal, tuvo a un buen aliado al lado como es su amigo Luis Suárez, quien anotó el gol del empate a falta de segundos para que el árbitro Hernández Hernández pitase el final del partido. El Barça tiene suerte de tenerles en el equipo.