Si el barcelonismo esperaba que el FC Barcelona saldría con otra cara distinta tras el ridículo ante el Levante, y con una intensidad alta para convencer desde el minuto uno a los aficionados presentes en el Camp Nou, se equivocaban. El Slavia de Praga volvió a dejar en evidencia a los culés, de la misma manera que ocurrió en el segundo tiempo del partido disputado en la República Checa.

Con una defensa muy adelantada y una presión intensa arriba, los checos provocaron constantes pérdidas de balón de los centrocampistas y atacantes culés, quienes tuvieron que recibir de espaldas en la mayoría de las ocasiones. Busquets, Piqué y Lenglet fueron los jugadores del Barça que dieron más pases -la mayoría de ellos horizontales-, y a excepción de algunas jugadas aisladas el Barça no encontró profundidad.

El atrevimiento del Slavia de Praga volvió a poner contra las cuerdas al FC Barcelona, e incluso llegó a marcar un gol que anuló el VAR por fuera de juego. Los checos llegaron con muchos efectivos al ataque y el Barça, que estuvo lento y espeso en las combinaciones, una vez más tuvo que rendirse a la magia de Leo Messi para generar alguna ocasión de peligro.

El astro argentino aprovechó los espacios para marcarse una carrera de 60 metros, plantarse en los aledaños del área rival y soltarse un chutazo que pegó en el travesaño, pero tampoco intimidó a los checos. El Slavia de Praga siguió atacando con mucha gente y dificultando los planes del Barcelona, que no estuvo cómodo sobre el césped en ningún momento.

Valverde no encontró soluciones

Ernesto Valverde se desgañitó en la banda durante todo el primer tiempo, y Piqué, Busquets y Semedo vieron cartulinas amarillas para intentar frenar las acometidas ofensivas del cuadro visitante. Leo Messi volvió a aparecer en los últimos minutos del primer acto para disparar a portería, pero esta vez fue el portero Kolar el que desbarató la ocasión.

Con más lanzamientos de córner y más protagonismo en el área contraria que el FC Barcelona, el Slavia de Praga dejó patente, por enésima vez esta temporada 2019-20, que los de Ernesto Valverde no están ni mucho menos a su máximo nivel. Y jugando como en la primera parte ante el Slavia, difícilmente se podrá acabar levantando la 'orejona'...