Leo Messi no sólo tiene el don de ser el mejor jugador del mundo y, probablemente, de la historia, sino que también tiene el don de aparecer en las mejores celebraciones del equipo azulgrana. El vídeo que acompaña esta noticia así lo puede atestiguar.

Desde su primer tanto ante el Albacete, donde se subió a la espalda de Ronaldinho, a las ya irrepetibles imágenes que han dejado la remontada ante el Paris Saint-Germain y la del Santiago Bernabéu ante el Real MadridEl argentino ha dado rienda suelta a su felicidad de formas de lo más inverosímiles.

Muchas de estas han pasado a la historia, como en la que se besa el escudo azulgrana en el estadio madridista, o en la que coge su bota tras anotar de cabeza el segundo gol al Manchester United, en la final de la Champions League 2008-2009. Aquella en la que se dirigió a Pep Guardiola cuando ya se sabía que se iba, o en la que entre todos le subieron a hombros y mantearon al superar a Telmo Zarra como máximo goleador histórico de LaLiga.

La del Bernabéu, la más especial para el barcelonismo

Pero sin duda alguna, la última ante el Madrid a dado la vuelta al mundo. Pues  fue en el minuto 92, con los blancos que nunca habían perdido en la historia en el añadido en su casa y que el tanto lo hizo él, su manera singular de explotar de alegría no dejó indiferente a nadie. El diez se plantó ante la grada donde estaban los aficionados culés y les dejó una imagen para la historia.

Se quitó la camiseta y tras abrazarse con todos sus compañeros, se quedó unos segundos ante el público. Mostró su zamarra con su nombre y el número diez para deleite del aficionado blaugrana.