Ahora mismo, Luis Suárez es el gran recurso ofensivo del Atlético de Madrid. Pasan los años por él pero no pasan los goles, ni el rendimiento. Con 34 años, el uruguayo se ha encargado de zanjar cualquier debate con los números en la mano, su respuesta más eficaz para aquellos que le quieren retirar antes de tiempo.

Suárez es uno de los mejores delanteros del mundo, tiene una jerarquía como pocos. Muchos le cambiarían en los minutos finales, pero al final siempre está ahí para marcar”, reflexionaba recientemente Diego Simeone. “Está claro que Luis sigue siendo uno de los mejores delanteros del mundo en el área, eso no se olvida”, comentaba Hermoso tras la victoria en Getafe hace unos meses, en la que el uruguayo fue clave.

Durante el pasado curso, el ex delantero del FC Barcelona fue clave. Su contribución en goles se convirtió directamente en puntos: 23 de los 86 que le dieron el título al Atlético salieron en exclusiva de sus botas. Y en el momento más apremiante del Atlético, respondió por el equipo, y fue precisamente en los últimos partidos para definir el campeonato, arrebatándoselo de las garras al Real Madrid.

Es decir, que con los tres puntos ante el Getafe y sus dos goles frente a la Real Sociedad, son ya 27 los puntos directos que le ha dado el uruguayo con sus tantos. A eso se le suma que, con su gol en Milan en el tiempo añadido, en Champions League, le otorgó otros tres en esta competición. En total, ya acumula 30 puntos gracias a sus goles decisivos.

Su rendimiento más alto

Suárez, por números, está en el mejor momento de su carrera. Según los datos proporcionados por Bessocer Pro, en sus primeros 50 partidos con el Atlético ha hecho 28 goles, que es la misma cantidad que hizo con el FC Barcelona en el primer centenar de partidos en el club catalán. Y son ocho más que los que hizo con el Liverpool en esos primeros 50 partidos y tres más que los que hizo en el Ajax.

En la presente campaña por LaLiga, sumando 571 minutos en nueve partidos, ha repartido una asistencia y solo ha marcado uno de sus goles de penalti y ha hecho seis en total (de los siete que lleva). Para ello ha necesitado 16 disparos, es decir que anota un gol cada 2,6 remates.

Trabajo específico

El trabajo físico, cuidados alimenticios y descanso son las claves de su éxito. Así lo explicó el propio jugador en palabras a ESPN: “Tengo muchas horas que me pierdo de estar con mis hijos por intentar estar bien físicamente para seguir rindiendo al máximo. Esos esfuerzos van cambiando los tiempos y uno va siendo consciente de la edad, del estado físico y del rendimiento que quiere dar. Ahora necesito ese trabajo físico preventivo para seguir en forma”.

“A los 25 o 27 tenía molestias y decía ‘con esto no pasa nada’. Hoy todo eso influye y hay que tener otro cuidado personal. La alimentación cambió mucho. El arroz con leche del Complejo Celeste lo veo pasar nomás. Y después de cada partido el helado con dulce de leche está, pero uno va sabiendo qué puede comer y qué no. Vas aprendiendo. La generación de hoy está aprendiendo todo eso”, señaló Suárez sobre el cambio de su alimentación y rutinas.