Kylian Mbappé es uno de los mejores jugadores del mundo y está llamado a ser quizás el mejor durante muchos años. Sin embargo, a sus 22 años el francés todavía comete ciertos errores de juventud que debería corregir con el tiempo. Contra el Metz, este pasado miércoles, el galo se pasó de la raya con sus rivales y acabó llevándose la bronca de éstos y de su entrenador, Frédéric Antonetti.

"Tendría que comportarse mejor si quiere ser un futbolista querido. Me encanta su forma de jugar, es realmente bueno, pero le beneficiaría ser más humilde", dijo el técnico del Metz después de la agónica victoria del Paris Saint-Germain sobre los suyos por 1-2. Achraf Hakimi le dio el triunfo a su equipo con un tanto en el minuto 5 y otro en el 95, segundos antes de que el árbitro pitara el final.

Las palabras del entrenador del cuadro local se debieron a un gesto de burla que Mbappé le hizo a Oukidja, el portero del cuadro del noreste de Francia. El atacante se rió del arquero en la celebración de la diana de Achraf y éste se fue directo a por él. En el córner del estadio tuvo que intervenir Marquinhos para que el meta dejase en paz al 'crack' y la celebración pudiese proseguir sin problema.

Pero antes de este lío que casi acaba con bronca seria entre Kylian y el guardameta del Metz, ambos ya tuvieron sus más y sus menos. El de Bondy fue quien lo inició todo cuando tuvo que devolverle la pelota a los locales después de que éstos la tiraran previamente fuera para que uno de sus jugadores fuera atendido. A la hora de darles la pelota, el punta estuvo muy cerca de marcar, ya que buscó una especie de vaselina.

Mbappé casi marca tras una supuesta cesión

Desde fuera del área, Mbappé la cedió hacia atrás con demasiada fuerza y por arriba, cuando Oukidja estaba varios metros adelantado. El portero llegó milagrosamente a la pelota y logró sacarla con un gran salto hacia atrás y una buena parada. El futbolista parisino dejó claro con su gesto que no había sido para tanto, dejando caer que no lo hizo queriendo, pero sus rivales, especialmente el arquero, no lo vieron así.

En esa acción fue cuando ambos empezaron a 'picarse' y por eso la estrella se burló de él después del 1-2 del Paris Saint-Germain. El entrenador del Metz también acabó tremendamente encendido con el internacional 'bleu' y tras quejarse al árbitro por todo este episodio de forma vehemente, acabó siendo expulsado. "Tendría que comportarse mejor si quiere ser un futbolista querido", dijo el míster. Francia parece que no le tiene especial aprecio ahora mismo, aunque al punta parece no importarle demasiado.