Después de todo un calvario que ha durado seis meses, Rafinha Alcántara ha podido disfrutar sobre el terreno de juego. Ya con el alta médica, conseguida hace unas semanas, y tras haber sido convocado con la selección olímpica de Brasil, el hispano brasileño disputó la última media hora del partido amistoso frente a Sudáfrica. Y el joven de 23 años tuvo tiempo hasta para regalar magia y volver a sentirse parte de un triunfo.

Y es que Rafinha dio una asistencia de gol tras haber sustituido a Rodrigo Cais en el minuto 60. El centrocampista del Barça dio el pase del gol de Andreas Pereira, que cerró el encuentro con un tres a uno favorable para la canarinha ante los africanos. Rafinha no jugó en el primero encuentro ante Nigeria, días antes.

Las palabras del jugador tras volver a sentirse futbolista fueron una mezcla entre euforia y felicidad: "Ha sido maravilloso, la sensación de volver a jugar es única. He tenido que estar seis meses parado por una lesión y por fin puedo a hacer lo que más me gusta que es jugar a fútbol". Quiso dar las gracias a la afición brasileña que lo recibió con una gran ovación. Me siento muy querido por esa 'torcida' que nos ha incentivado durante todo el partido", expuso.

Es, por tanto, que en la Ciudad Condal están de enhorabuena con el este gran refuerzo para lo que queda de temporada. Si bien en un principio se esperaba que sólo entrenase, su buena evolución física acabó haciendo el resto y permitiéndole disfrutar con el resto de sus compañeros. Después de ser operado el pasado 22 de septiembre tras la escalofriante falta que le hizo Nainggolan en el Roma-Barça de Champions, el jugador obtuvo el alta el pasado 17 de marzo.