Rafinha Alcántara volvió a Vigo hace poco más de una semana para jugar cedido en el Celta esta temporada. Será la segunda experiencia del hispano-brasileño en el conjunto gallego, en el que jugó cedido hace varias campañas. El mediapunta ha sido uno de los mejores del Barça en pretemporada y es un refuerzo de lujo para los vigueses.

Antes de marcharse al Celta, el futbolista renovó con el FC Barcelona porque acababa contrato en junior de 2020. El club quiere cobrar algo por su traspaso y le puso como condición para salir cedido que renovase antes. Por lo tanto, el de Sao Paulo debería regresar a Can Barça el verano que viene para reincorporarse a la disciplina azulgrana.

Pero en Vigo no quieren que eso suceda y el presidente del equipo gallego ha dejado claro que el jugador se podría quedar allí más allá de este curso. Carlos Mouriño cree que podría ocurrir si el centrocampista ofensivo pone de su parte. "Se puede dar perfectamente. Siempre que Rafinha quiera y el Celta esté dispuesto, la posibilidad existe", reconoció.

Pero más allá del deseo de Rafinha, el máximo mandatario del Celta admitió que fichar a un futbolista como él es complicado por cómo está el mercado. "Hay que pensar de qué tipo de jugadores estamos hablando. Se han puesto en el mercado y la retención de esos futbolistas es complicada", aseguró.

El Celta ha hecho un desembolso importante este verano con varios fichajes de relumbrón. Volvió Santi Mina tras su paso por el Valencia y también Denis Suárez, por el que los gallegos pagaron casi 13 millones de euros. Rafinha costaba también alrededor de 15, pero si hace un buen año en Vigo su precio se podría disparar. Eso es probablemente lo que teme Mouriño.

Rafinha podría ser una de las revelaciones de LaLiga

El hispano-brasileño destacó el año que estuvo cedido en Balaídos y espera poder volver a hacerlo esta campaña. Si da el nivel que ha dado en pretemporada y en el inicio de Liga con el Barça, podría ser una de las revelaciones del campeonato. Tiene calidad, presencia, gol y una polivalencia que le hacen ser imprevisible. Si encuentra su sitio en el Celta y le respetan las lesiones, brillará como debió haber brillado en el Barcelona.