Tras varios días de entrenamientos en la Ciudad Deportiva, los futbolistas del FC Barcelona que no tienen compromisos internacionales han obtenido un permiso de Ernesto Valverde, que les dejó viernes, sábado y domingo libres. Varios han aprovechado para hacer algunos viajes, y uno de los más curiosos ha sido el de Rafinha Alcántara. 

Pese a que no ha aclarado si ha sido por placer o una visita expresa, el caso es que el brasileño ha estado junto a Arda Turan en Estambul, donde ha compartido algunas horas junto a un ex compañero con el que forjó una gran amistad. A lo largo de la pasada campaña, el de Sao Paulo y el de Fatih estuvieron apartados durante varios meses, y parece que su retiro acabó uniéndoles bastante.

Los motivos no podían ser más distintos, y es que el ex del Atlético de Madrid no contaba para el técnico y no aceptó una salida antes de enero, mientras que el centrocampista estaba lesionado. Finalmente, ambos hicieron las maletas en el mercado invernal, e primero rumbo al Istambul Basaksehir y el segundo camino al Inter de Milán.

Ahora, la sanción por una agresión a un árbitro tiene al turco fuera de combate, aunque ha recibido ánimos de un amigo más cercano de lo que podía parecer. En una fotografía en las redes sociales, el canterano mostró que estuvieron cenando con algunos conocidos más, y le ha dedicado el mensaje: "Sobre la pasada noche. Gracias, hermano"

Rafinha vivió una graciosa anécdota en Turquía

Además de compartir tiempo con Arda, Rafinha aprovechó para hacer turismo por Estambul, y acabó compartiendo una anécdota graciosa. Al pasar junto a unos niños que estaban jugando en un parque, el brasileño recibió un pase, y lo devolvió con tan mala puntería que lo dejó en la copa de un arbusto cercano.

Evidentemente, las carcajadas se cebaron con el futbolista profesional, que supo reírse de sí mismo y se excusó con las palabras que acompañaban al vídeo. "Lo siento chicos, es mi día libre", apuntaba el brasileño, que también comparía iconos de lamentación y algunos de carcajadas.