Xavi Hernández asumió el cargo como entrenador del primer equipo del FC Barcelona en uno de los peores momentos de su historia. Sin embargo, la buena labor del egarense, junto a una excelente comunicación con la directiva, han hecho que la institución poco a poco retome su sendero. Entre los ajustes más importantes que ha realizado es la incorporación de jugadores, y el mercado de invierno ha marcado un antes y un después dentro de su gestión.

La gran apuesta del de Terrassa fue el fichaje de Ferran Torres. El valenciano aterrizó en el Camp Nou por 55 millones de euros y con una lesión en su pie derecho que le había dejado en el ostracismo por casi cuatro meses. Sin embargo, la decisión del técnico estaba tomada y el objetivo era recuperarle al cien por ciento a la mayor brevedad posible. Y así lo han hecho.

El de Foios había perdido resistencia y fondo físico a causa de su tiempo de baja, pero la continuidad y confianza que le ha dado el club le ha hecho 'renacer'. Después de su debut en el Clásico de la Supercopa de España ante el Real Madrid, el atacante encadenó una serie de partidos sin descanso: 120' minutos ante el Athletic Bilbao en Copa del Rey, 90' ante el Alavés, Atlético Madrid, Espanyol y Valencia por Liga, 90' y 81' respectivamente en la eliminatoria ante el Napoli en Europa League y 66' nuevamente ante el Athletic en un compromiso liguero.

Todos habían entrado en las rotaciones menos Ferran, que 'descansó' ante el Elche en el Martínez Valero, aunque participaría en la segunda mitad en el tanto que igualaría parcialmente el compromiso. Ese 'maratón', en donde está incluido los dos partidos ante el Galatasaray, han servido para que 'despegara' físicamente antes de su última presentación en la capital.

El Clásico

La gran cita de la temporada estaba en el Santiago Bernabéu. Los catalanes llegaban después de asegurar su clasificación a los cuartos de Europa League, y Ferran Torres fue parte de la exhibición futbolística que dejaría plasmado el Barça en la retina del aficionado merengue. Después enviar afuera un mano a mano con Courtouis, pasó solo un minuto antes de que tuviera revancha y convirtiera el (0-3) parcial en el marcador. Posteriormente, el (0-4) de Aubameyang tuvo su origen de un desmarque suyo en profundidad, lo que terminaría de sellar la apoteósica victoria azulgrana. A casi tres meses de su debut, Xavi ya tiene en sus filas a una de sus estrellas del futuro.