El Clásico de este domingo en el Santiago Bernabéu podría decidir esta Liga en favor del FC Barcelona, que llega con dos puntos de ventaja a su disputa. Los azulgrana aspiran a dejar a los madridistas a cinco puntos de distancia para encarrilar su triunfo en el campeonato doméstico. Será un duelo tremendamente competido entre dos conjuntos completamente opuestos que para mejorar necesitan precisamente lo que tiene el otro.

El Barça es, con 29 tantos, el segundo equipo que más goles encaja entre los seis primeros clasificados de LaLiga. El Real Madrid, por otro lado, es el equipo menos goleado de toda la competición, con solo 17. En cambio, los merengues suman solo 46 dianas a favor en lo que va de temporada liguera, por los 62 que llevan los barcelonistas, que son los máximos goleadores de esta Liga. Un choque de estilos en toda regla en el que los catalanes tienen ventaja.

Hace un par de meses, los de Zinedine Zidane eran uno de los equipos más sólidos y sobrios de todo el continente europeo. Los blancos apenas encajaban goles y tampoco concedían demasiadas oportunidades a sus rivales. Los madridistas suplían su falta de pólvora arriba con una defensa impecable e impenetrable basada en Carlos Henrique Casemiro, Fede Valverde, Ferland Mendy y la mejoría de Sergio Ramos y Rapha Varane.

Pero en las últimas semanas esa seguridad se ha venido abajo y el Madrid ha recibido un total de 10 goles en sus últimos cinco compromisos. Una cifra altísima causada por las rotaciones de Zidane, que empezó a darle descanso a Mendy y Valverde. La presencia de Marcelo por el galo y la de Modric por el charrúa han desdibujado al equipo en muchos encuentros y, a la larga, ha provocado que vuelvan las dudas atrás. Sumando esto a que Karim Benzema, el único madridista que da la cara en el aspecto goleador, lleva dos goles en todo el 2020, la conclusión es que 'Zizou' tiene un problema gordo.

El Barcelona, por su parte, todavía concede demasiado en defensa y sigue sin dar al paso que necesita para hacerse fuerte atrás. Los azulgrana siguen dejando dudas, tal y como demostraron en Nápoles, pero arriba siguen teniendo a un Leo Messi que vale por tres. El argentino marca, asiste, juega y hace jugar, algo que siempre hace que los culés aspiren a todo. Además, Antoine Griezmann siempre es un peligro de cara a gol y suele ser certero siempre que se le necesita.

El Barça ha encajado la mitad en los últimos 5 partidos

En los últimos cinco partidos, los de Quique Setién recibieron cinco goles en contra, la mitad que el Madrid. Es cierto que 4 de los tantos que le metieron a los merengues fueron en un mismo partido (3-4 contra la Real), pero los datos siguen estando ahí. En el Clásico, los barcelonistas tienen que aprovecharse de las dudas que arrastran últimamente los blancos en su zaga para darles un golpe casi definitivo en LaLiga.