Parecía que todo le iría muy bien al Atlético de Madrid este domingo en el Ciutat de València. Porque se enfrentaba a un rival ya descendido y porque se adelantaba con un tempranero gol de Fernando Torres, que parece estar tocado por la varita de las esencias. El madrileño tuvo la sentencia en el minuto veinte y, tras personar, llegó la tragedia con dos goles del Levante UD en el segundo tiempo.

Esta es la mejor definición de tirar una Liga, lo que ha hecho este domingo en Valencia el Atlético de Madrid. Los "colchoneros" se durmieron en los laureles, quizás por exceso de confianza por el rival al que se enfrentaban y por el gol tempranero de "el Niño" y quizás también por el cansancio acumulado tras el esfuerzo descomunal que tuvieron ante el Bayern de Munich el pasado martes en la vuelta de las semifinales de la UEFA Champions League.

Pues después de veinte minutos brillantes, los levantinistas se hicieron con el partido y primero llevaron el peligro con Verza y Lerma con sendos disparos desde fuera del área. Tras esos dos acercamientos por parte del equipo granota apareció el colombiano Cuero para colarse por la banda y sacar un preciso centro que Víctor Casadesús aprovechó para rematar al fondo de las mallas.

En "shock", los de Simeone no reaccionaron en el segundo tiempo a pesar del doble cambio que realizó metiendo a Griezmann y a Carrasco por Correa y Augusto Fernández. El francés tuvo el tanto para adelantar a los suyos pero Diego Mariño salvó a los suyos y, posteriormente, fueron entre Rubén Morales y Giuseppe Rossi los encargados de finiquitar a los rojiblancos y dejarlos fuera de la lucha por el campeonato liguero con el tanto del italoamericano. 

Después de las victorias del FC Barcelona y del Real Madrid, el Atleti se queda a tres puntos del conjunto azulgrana y sólo puede optar por el segundo puesto con el equipo merengue.