Aunque sigue teniendo favoritos y víctimas, LaLiga 2018-19 se ha abonado a la locura, un hecho que volvió a quedar demostrado en un Atlético de Madrid-Athletic Club. Los bilbaínos se adelantaron en dos ocasiones en el marcador pero eso no suficiente para puntuar, porque la raza de los 'colchoneros' les dejó fuera de combate con un gol sobre la bocina y obra de un futbolista lesionado. En la capital ya miran al FC Barcelona.

Durante muchos minutos, en el Wanda Metropolitano mandó la estrategia de Eduardo Berizzo, que anuló a su rival con una buena defensa y le buscó las cosquillas encontrando espacios a la contra. Iñaki Williams puso por delante a los visitantes remachando un balón al palo de Mikel San José, pero en el segundo tiempo, antes de la locura definitiva, un zambombazo de Thomas desde la distancia devolvió las tablas al electrónico, en el primer tiro a puerta de los locales.

Con una propuesta muy ofensiva en busca del triunfo, los madrileños vieron como el panorama se complicaba por momentos. Otra escapada del '9' supuso el 1-2, y Diego Godín se rompió cuando no había cambios para sustituirle. La persecución del 'león' le salió muy cara al uruguayo, pero el Cholo Simeone decidió improvisar y decirle que permaneciera sobre el césped actuando como delantero centro.

Quedaba media hora y los atléticos estaban volcados, y como la sentencia no llegó, lo que sí lo hizo fue de nuevo el empate. Centro de Thomas y cabezazo con lo justo de Rodrigo, que situaba el 2-2 a falta de 10 eternos minutos por jugarse. En el primero del tiempo añadido llegó un tanto de Godín, y por si faltara emoción, hubo que consultar al VAR. El remate del central tras una prolongación de Antoine Griezmann estaba habilitado, y la grada estalló en alegría cuando por fin se señaló el final. 

El Atlético quiere 'cazar' al Barça

Quedan varios compromisos por disputarse para completar la Jornada 12, pero con permiso del resto, el Atlético señala sin cansarse que su candidatura al título se mantiene muy firmeLos rojiblancos se han descosido con varios empates a destiempo, pero acechan el liderato a sólo un punto del primer clasificado, eso sí, teniendo en cuenta que acumulan un partido más.

La presión es evidente antes de que el Barça reciba al Real Betis, pero es más agobiante todavía atendiendo a que la Jornada 13 les cruza con los madrileños en el Wanda. No es la primera vez que los hombres de Ernesto Valverde superan un desafío de máximo nivel, pero los de Simeone también tienen sus armas y esperan que la emboscada acabe surtiendo efecto. Este domingo otro capítulo, y en apenas un par de semanas, el primer desenlace de la temporada.