Finalizada ya la temporada 2017-18, y con el 'doblete' de Liga Santander y Copa del Rey amarrado, cabe recalcar que, aunque el FC Barcelona no haya podido llegar a los 100 puntos y tampoco haya quedado imbatido, sí ha firmado unos grandísimos registros que sirven para protagonizar, de nuevo, una temporada histórica para los intereses culés.
Además del prestigio que supone ganar LaLiga con semejante superioridad con respecto a los rivales, hay otro récord liguero que los azulgrana han igualado, y se trata de la mayor ventaja histórica sobre el Real Madrid en el campeonato de la regularidad. El límite estaba en 17 puntos de diferencia, y el FC Barcelona ha conseguido finalizar LaLiga 2017-18 precisamente con esa ventaja con respecto al eterno rival.
Los primeros 17 puntos de diferencia a favor del Barça llegaron en la campaña 1984-85, con Terry Venables a los mandos y cuando las victorias valían sólo dos puntos. De los 53 de los culés se quedaron muy lejos los 'merengues', estancados en 36. Otros registros destacados son para Enrique Fernández y Johan Cruyff ( 16 en el curso 1947-48 y en el 1973-74) y Tito Vilanova ( 15 en la 2012-13).
El reto que ha quedado pendiente al FC Barcelona es el que ostenta el Real Madrid sobre los culés. Los blancos lograron hasta en tres ocasiones dejar al máximo rival a 20 puntos o más de distancia. El tope fue de nuevo con Venables en el banquillo, aunque esta vez el inglés acabo destituido y el conjunto de Leo Beenhakker arrolló, subiendo el listón hasta los 23 (1987-88).
El Barça iguala un récord, pero quiere más
De momento, esta temporada el Barcelona ya ha igualado su mayor diferencia favorable con respecto al Real Madrid, firmando un 'doblete' que deseará ampliar la próxima temporada 2018-19 empezando por la Supercopa de España y, a partir de ahí, luchando de nuevo por conquistar los títulos nacionales y especialmente la Champions League, que será el gran objetivo.
Probablemente la próxima campaña no se den distancias tan exageradas entre ambos conjuntos. Sea como sea, y con las plantillas renovadas, los de Ernesto Valverde tendrán el mismo desafío de siempre: ganar todos los partidos y todos los trofeos en disputa.