El Real Madrid trató de reaccionar con Zinedine Zidane en una temporada dolorosa, pero parece que sus males sólo tendran remedio en el mercado de fichajes. El marsellés regresó en el tramo final del curso al Santiago Bernabéu y únicamente ha conseguido puntuar en casa, porque cada vez que su equipo sale de viaje, los adversarios lo desmontan y le hacen vivir jornadas tan incómodas como la de este domingo en Anoeta.

La Real Sociedad intentó maniatar a los blancos hasta que se destapó Brahim Díaz con un golazo, en el que superó a varios rivales antes de batir a Gerónimo Rulli. El malagueño resistió una embestida, se echó un balón largo, tumbó a un contrario con un amago y tras meterse hasta la cocina tuvo la frialdad para superar al guardameta con un disparo raso.

El tanto 'merengue' obligó a acelerar a los de casa, que se emplearon a fondo y empezaron a acumular ocasiones. Lo probaron Mikel Merino y Mikel Oyarzabal, y tras una diana anulada por el VAR por un fuera de juego, fue el ex del Borussia Dortmund quien logró igualar. Una brillante triangulación en la frontal dejó vía libre al centrocampista, que no perdonó cuando tuvo hueco para chutar.

Los 'txuri urdin' se estaban comiendo a su rival en el centro del campo, y Jesús Vallejo protagonizó otra jugada clave para el duelo. Un balón largo lo cazó Oyarzabal y tras una serie de despejes fallidos lanzó, y en su intento de desviar el cuero, el central lo tocó con la mano. Penalti y expulsión, y poco consuelo madridista pese a que Thibaut Courtois se mantuvo firme y atrapó el intento de Willian José.

La Real Sociedad golea a un Real Madrid escaso

Si al Real Madrid le había tocado sufrir en igualdad, obviamente, peor le fue en inferioridad numérica, porque la Real Sociedad tuvo más campo y más decisión para buscar el triunfo. Tras intentarlo con algunos disparos desde la distancia, no tardó en voltear el resultado y olvidar la pena máxima errada por su delantero centro, cuando Rubén Pardo puso un centro largo que Joseba Zaldúa conectó con un testarazo en el que superó a Marcelo y también a un Courtois a media salida.

En otra oportunidad que Oyarzabal envió al palo, Ander Barrenetxea puso el tercero, recogiendo el rebote y tirando con todo en un remate que el belga tocó pero no pudo desviar. Aún pudo ser mayor la sangría cuando se fueron arriba los blancos, porque Casemiro hizo un penalti a Adnan Januzaj y este siguió en busca del gol. No lo encontró porque le frenó la madera, pero la goleada ya no se movió del electrónico.