El viernes se confirmó que Robert Lewandowski se perderá los próximos tres partidos del FC Barcelona en LaLiga. Fue expulsado en el último choque, contra el Osasuna, después de ver las dos cartulinas amarillas. Tras agotar todas las instancias, el cuadro azulgrana no consiguió reducir el número de enfrentamientos. 

Así pues, Lewandowski se perderá los partidos contra el RCD Espanyol, Atlético de Madrid y Getafe. Eso sí, podrá estar presente en los choques de la Copa del Rey, en la que el Barça debutará el 4 de enero contra el Intercity, y Supercopa de España, el día 8 con las semifinales ante el Real Betis. 

En todo momento, el ariete polaco ha dejado claro que considera que es una sanción excesiva para lo que realmente sucedió y, en una reciente entrevista a 'SPORT', volvió a repetirlo. Lewandowski ha dicho que "con el árbitro no pasó nada. Solo que me enseñó las dos amarillas, eso es todo. Pero la razón por la que me han castigado con tres partidos no tenía nada que ver con el árbitro, sino conmigo y con el técnico. Es todo lo que puedo decir".

Sobre el gesto (por el que le cayeron dos partidos de sanción), insistió en que no tenía que ver con el colegiado y que 'nació' de una charla con Xavi Hernández, su entrenador: "Una o dos semanas antes estuvimos charlando con Xavi y me dijo que tenía que vigilar si el árbitro me enseñaba una amarilla, pero aquello solo fue un gesto para expresar que no podía entender lo que estaba pasando. Lo habíamos hablado y era algo entre Xavi y yo. No entendía nada".

Baja sensible para el Barça

En el Barça reina la indignación por la sanción de Lewandowski, porque es excesiva. Será una baja muy sensible para Xavi, a sabiendas de que es un jugador que ha anotado el 40% de los goles del equipo en lo que va de temporada (18 de 45). 'Lewy', finalmente, dijo que "es difícil porque siento que tres partidos son demasiado por lo que hice. Eso seguro. Y es doloroso no poder jugar tres jornadas por eso".