El Real Madrid es el nuevo líder de LaLiga, aunque compartido con el Girona de Míchel. Los de Carlo Ancelotti, que parecen tener las siete vidas del gato, han sumado tres puntos en un partido que parecía destinado al empate en Mendizorroza. Mostraron su versión más fría, sin "garra", pero con el gen competitivo y anador que les caracteriza. Lucas Vázquez fue el encargado de vestirse de héroe, 'in extremis' -como tanto gusta al Madrid- para cerrar el 2023 con fiesta y victoria. 

Los 'merengues' tuvieron uno de sus partidos más complicados en lo que va de esta temporada. El Alavés presionó, complicó y se encerró en su campo para 'frenar' a los Bellingham o Brahim. La historia parecía destinada al fracaso cuando Nacho salió expulsado y dejó al Madrid con más problemas que soluciones, pero sacaron adelante el partido en el descuento. Con épica, lesiones, expulsados y sin brillo... pero con una victoria que puede ser, como poco, clave. 

El Madrid se va de vacaciones de Navidad, pero no antes sin sufrir en un partido bastante atascado en Vitoria. Han sido varias historias en una, porque Carlo Ancelotti no se esperaba un partido tan cerrado. Había apostado por lo mejor que tenía en su XI: Rodrygo Goes y Brahim Díaz como máximas referencias en el ataque, además de cumplir la promesa de Kepa en la portería. El planteamiento más lógico para intentar asaltar la casa de un Alavés que convirtió su retaguardia en un muro difícil de superar para los merengues. 

Sufrimiento de un Madrid atascado en Mendizorroza

Los madridistas tuvieron sus oportunidades claras desde el primer instante del enfrentamiento, con una salida rápida de Fede Valverde, pared con Brahim en la frontal del área y disparo al palo corto, pero con una gran intervención de Sivera. La Casa Blanca quería 'matar' rápido el encuentro, pero no tuvieron claridad para penetrar el área de un Alavés que estaba muy seguro atrás y que supo cómo incomodar a los visitantes. Rodrygo Goes y Brahim Díaz fueron quienes intentaron dinamizar el ataque, mientras que Jude Bellingham estuvo muy controlado y sin capacidad para intervenir en el juego. 

Y es que, de hecho, salvo un cañonazo de Fede Valverde pocos minutos antes de que acabara la primera mitad, al Madrid le costó generar ocasiones de cara al área de un Sivera que firmó un paradón para negarle el gol al centrocampista uruguayo. Los locales consiguieron la fórmula para poblar su campo y plantarse rápidamente con una línea de hasta cinco jugadores para defender al Madrid. El Alavés se valió de la velocidad de Rioja y Rebbach para irse de contragolpe y 'molestar' a Kepa en su área. 

El Madrid se quedó con 10 muy pronto

Las buenas noticias no llegaron para el Real Madrid tras la reanudación, porque Nacho Fernández fue expulsado con roja directa por segunda vez en lo que va de temporada por una dura entrada a Samu Omorodion. Díaz de Mera había señalado, en principio, una amarilla, pero tras revisión en el VAR cambió su decisión y dejó a la Casa Blanca con diez jugadores. Carlo Ancelotti tuvo que intervenir y usó a Tchouameni como central, juntándolo con Rüdiger. Los visitantes intentaron adelantar líneas, pero no estuvieron acertado ante el 'muro' vitoriano. 

Rodrygo tuvo una muy buen oportunidad tras hacerse con un balón en largo de Toni Kroos, que rescató en la banda. Se fue en carrera hacia el área, pero su remate se fue desviado por poco. Los madridistas no encontraban la fórmula para 'vivir' en el área de los locales y los ataques llegaron a cuentagotas, sin la claridad ofensiva que habían mostrado durante el fin de semana contra el Villarreal. 

El Madrid no se quiere rendir en LaLiga

En un partido que parecía destinado al empate, la garra del Madrid se impuso. Lucas Vázquez, indiscutible en el XI desde la lesión de Dani Carvajal, apareció como héroe inesperado en Vitoria. Toni Kroos, en el 90+2', mandó un lanzamiento desde el córner y el Alavés se encargó de cubrir a los grandes rematadores de la Casa Blanca, dejando espacio para que el '17' entrara y se vistiera como héroe inesperado para mandar un cabezazo potente que superó a Sivera. El punto final para un partido que, por sensaciones, debió quedar en tablas... Pero el Madrid no quiere dejar la pelea por LaLiga.