El delantero colombiano del Sevilla, Luis Muriel, certificó la doble ventaja del conjunto hispalense contra el FC Barcelona a los cuatro minutos de la segunda mitad, cuando recogió un rechace de Ter Stegen para, desde la frontal del área, plasmar un disparo raso y muy colocado -aunque ligeramente desviado por Umtiti- que Marc-André Ter Stegen no pudo atajar.

Doble ventaja para un Sevilla que durante todo el partido mereció ir por delante en el marcador, ante un FC Barcelona demasiado pasivo en defensa y que pagó caras sus concesiones. Poco después de la diana de Muriel, además, el Sevilla pudo marcar un tercer gol de las botas de Franco Vázquez, aunque el disparo del 'Mudo' se marchó fuera rozando la escuadra.

¿Fatiga del Barça por el parón de selecciones?

El caso es que el FC Barcelona no estuvo lo suficientemente fresco, justo después de este último parón de selecciones, para contrarrestar la intensidad del Sevilla en el Sánchez Pizjuán, que fue una caldera para aupar al conjunto entrenado por Vincenzo Montella.

Los culés no estuvieron a la altura y quizás pensaron demasiado también en el partido de ida de cuartos de final de la Champions League, reservando fuerzas para ganar a la Roma en el Camp Nou teniendo en cuenta que LaLiga Santander 2017-18, fuese cual fuese el resultado contra el Sevilla en el Nervión, está prácticamente sentenciada.

El Barcelona no puede dormirse en los laureles

Los de Ernesto Valverde, eso sí, se dieron cuenta este sábado, contra el Sevilla, de que no podrán dormirse en los partidos que les quedan por disputar, siempre y cuando quieran certificar lo antes posible el título liguero que tan bien encarrilado tienen.

El 2-0 del Sevilla puso las cosas muy cuesta arriba al Barcelona, que incluso con la entrada de Leo Messi al terreno de juego, aunque cambió la cara y dominó más el partido en el frente de ataque, no pudo doblegar a un Sevilla muy sacrificado en todas las facetas. El Sánchez Pizjuán ha enviado un claro mensaje al Barcelona: todavía no hay nada ganado.