En Chamartín no se esperaban sufrir tanto ante un Girona en zona de descenso, todo lo contrario. Pasó de ser un partido de 'trámite' a una auténtica pesadilla y puzzle indescrifrable para los de Carlo Ancelotti, que no lograron sentirse cómodos en ningún momento ante el equipo de Míchel. Un muy buen gol de Vinícius Jr iba a resolver la tarde para los merengues, pero el VAR intervino para hacer justicia con un penalti que convirtió Stuani. El partido acabó en llamas por varias polémicas.

El Girona supo plantar cara al Real Madrid en el Santiago Bernabéu y les hizo pasar un primer tiempo muy amargo y complicado, porque estaban encerrándose muy bien atrás y salieron muy bien al contragolpe para retar una y otra vez a la defensa madridista y, en especial, a Thibaut Courtois. Los de Carlo Ancelotti estuvieron especialmente imprecisos y con dificultad máxima para dar continuidad a su juego. 

El cuadro catalán supo cerrar los espacios, con una línea de cinco defensores cada vez que el Madrid superaba el centro del campo. Era imposible sacudirse la presión y fueron comunes los disparos desde fuera del área, sobre todo de un Eduardo Camavinga que, de pivote para reemplazar a Tchouaméni, estuvo muy implicado en el juego en ambas áreas. De él nacieron dos disparos potentes que, de milagro, no se colaron en la portería rival. 

Rodrygo también estuvo muy incisivo, pero sin puntería: primero probó desde la frontal y Gazzaniga blocó lo justo para mandarla al córner y después se hizo con un zapatazo, a pase de Fede Valverde, que se marchó relamiendo el palo corto del guardameta del Girona. No obstante, las oportunidades más claras las tuvo el cuadro visitante en los primeros 45', con un remate de Yangel Herrera tras un pase de Valery que se estrelló en el larguero. La 'suerte' salvó al Madrid. 

El VAR mandó en el Bernabéu

En la reanudación, el Madrid supo 'morder' más y jugó más cerca del área del Girona, pero el sistema defensivo de los catalanes estaba siendo indescifrable e impenetrable para los 'merengues' en una tarde complicada para los locales. El Girona probó a Courtois con un mano a mano que el belga resolvió efectivamente a pesar de que había fuera de juego previo.

El Madrid, obligado a ofrecer 'más', tuvo su oportunidad del millón en el 71':  Dani Carvajal abrió a Fede Valverde que, dentro del área, puso el balón al segundo palo para la llegada de Vini Jr. Gol 'casi' replicado de la final de la Champions League que confirma que los dos son los guías de este conjunto madrileño, pero allí no acabó la historia: El VAR llamó a revisar un penalti por mano de Marco Asensio que Stuani, cómodamente, convirtió ante Courtois. 

Final en llamas 

El Madrid entró en estado de desesperación y Riquelme casi se aprovecha del desconcierto para marcar el segundo, pero su remate se marchó fuera tras un centro al área. Los 'merengues' consiguieron reaccionar, pero sin puntería: Valverde probó con un disparo desde fuera del área, demasiado desviado. Ambos equipos estaban desquiciados y los últimos minutos fueron una 'caldera' en el Bernabéu, sobre todo por el gol anulado a Rodrygo. 

En el último minuto del tiempo reglamentario, Mariano Díaz centró para la llegada del brasileño que, con falta, mandó el balón a lo más profundo de la red. El colegiado interpretó que había infracción sobre Gazzaniga y el gol no subió al marcador. La polémica continuó cuando, minutos después, Toni Kroos fue expulsado por doble amarilla. El Madrid no pudo con un Girona en descenso en una tarde para sacar conclusiones.