El Real Madrid sigue en buena racha y ha confirmado sus buenas sensaciones con un triunfo de mucha autoridad ante un Celta que siempre es un quebradero de cabeza. Los goles de Asensio y Militao definieron un partido muy trabajado, pero también solvente de una Casa Blanca que parece estar muy enchufada en el tramo final de la temporada... y que mete presión al FC Barcelona en la clasificación.
El Real Madrid recibió este sábado al Celta en el Santiago Bernabéu, pocos días después de haber asaltado Stamford Bridge para concretar su clasificación a las semifinales de la Champions League. Con ese 'antecedente' tan condicionante, Carlo Ancelotti apostó por hacer unos cuantos cambios en su alineación para dar descanso a los pesos pesados. La apuesta fue acertada, aunque a la Casa Blanca le tocó trabajar más de la cuenta para encaminar su triunfo.
Los madridistas mostraron una versión muy convincente y se dedicaron a 'trabajar', encerrando al Celta en su campo y dejándoles con muy pocas opciones de acercarse al área de Thibaut Courtois, pero sin generar suficiente peligro más allá de las arrancadas de Vinicius Jr que 'sembraron' miedo en los visitantes, pero que no fueron suficientes para generar ocasiones claras de gol, por falta de puntería y acierto.
Los de Carlos Carvalhal, con dificultades, supieron plantar cara en el Santiago Bernabéu, controlando el partido en varios tramos, pero sin la 'chispa' de Iago Aspas o Gabri Veigas como en otras noches. No estaban teniendo claridad y les costó, tal vez más de la cuenta, la fase de creación que, por cierto, es una muy mala noticia cuando te enfrentas a un Madrid que sabe matar con muy poco.
Marco Asensio rompió la igualdad... y a volar Militao
Después de los disparos lejanos de Karim Benzema, Dani Ceballos o Marco Asensio, el mallorquín fue el encargado de abrir el marcador en el tramo final de la primera mitad en una jugada 'made in Madrid' tras un pase al espacio de Ceballos a un Vinicius que puso atrás el balón, en el área, para la llegada del '11', que mandó un potente remate con la zurda para clavar el balón a la portería.
El Madrid terminó la primera parte con buenas sensaciones y dio continuidad a su estado de gracia en el comienzo de la segunda, poniéndose 2-0 muy pronto. Después de que Fran Beltrán despejara a córner un centro de Nacho Fernández, el envío fue cazado por un Eder Militão que entró con mucha fuerza, desde el punto penalti, para rematar de cabeza y batir a Villar. No podía hacer nada pare frenar el cabezazo.
El Celta, en el intento; p;el Madrid, firme
El gol de Militao, lejos de provocar la dimisión del Celta, provocó que Courtois apareciera más en escena. Los de Carlos Carvalhal intentaron quedarse en el área rival, pero el Madrid mostró mucha solidez defensiva para evitar meterse en problemas. Camavinga se vistió de protagonista, a la hora de partido, para hacer un 'tackle' a Iago Aspas cuando se disponía a atacar solo.
Después fue Villar quien estuvo obligado a intervenir, hasta en un par de ocasiones, para evitar que la diferencia fuese mayor en el electrónico. La Casa Blanca, que suma una nueva victoria, tiene síntomas importantes de que ha recuperado su versión más solvente para luchar por todo lo que pueda en este final de temporada. Ahora, presionan con fuerza a un Barça que, si no gana al Atlético, puede meterse en muchísimos problemas.